Si no los conocen aún, sabrán que se caracterizan por su desopilante humor a la hora de repasar los temas, en este caso los tebeos españoles, de la Post-Guerra a la Transición.
En este aplica su ácida mirada al tebeo español clásico, aquellos con los que crecieron nuestros padres y madres, de manera no exhaustiva pero si altamente disfrutable.
Títulos, personajes y autores van pasando con cada "viaje" a los ya casi desaparecidos kioscos en donde se expendían estas baratas fantasías para los niños y púberes de la Dictadura.
Así, desde los contenidos aleccionadores con olor a nacional-catolicismo de Flechas y Pelayos hasta el Superlópez de Jan, siendo este alguno de los primeros cómics que adquirimos nosotros, la siguiente generación, ya en la Transición.
Por supuesto, no faltan series míticas como Roberto Alcázar y Pedrín -del que realiza la enésima defensa de que aquellos cómics no tenían carga ideológica fascista-, Juan Centella, el Guerrero del Antifaz -con sus sibilinas féminas-. El Jabato, etc...
Por supuesto hay lugar para el humor de los tebeos de Bruguera como los capítulos dedicados al hambriento Carpanta -una de nuestras lecturas favoritas, ya en los 80- o el Gran Vazquez y sus múltiples creaciones.
Un magnífico volumen tanto para los estudiosos del medio como para el lector ocasional que quiera rememorar sus lecturas juveniles o las de sus ancestros.
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