Hace tanto que leí la novela que aquí se adapta que estoy disfrutando del cómic casi, casi, como una primera lectura, saboreándolo y redescubriéndolo todo gracias a la inmensa reinterpretación e ilustración de estos artistas.
En este tomo, mientras Mr. Wednesday continúa sus visitas reclutando antiguos dioses para su bando, Sombra acaba en ese aislado pueblito americano de vida aparentemente idílica pero que oculta un siniestro secreto, como delata la desaparición de una adolescente... ¡y no es la única! ¡Puro Twin Peaks!
Aún si te sabes la novela de memoria, el aporte artístico se degusta con deleitación: Sin duda Scott Haptom, a pesar de su obvia referencia fotográfica, realiza el trabajo de su vida.
Igualmente destaca la secuencia del dios africano Elegba y su rebelión de esclavos que realizar Mark Buckingham, otro de tantos artistas "difuminados" en el panorama actual cuando precisamente alcanzan su zenith creativo.
P. Craig Russell realiza su propia secuencia sobre dioses cavernícolas y adapta a Gaiman de una manera absolutamente INSPIRADA, remachando magistralmente cada una de las frases del escritor, versen sobre el mundo de los Dioses o sobre la más vulgar -y no menos reveladora- realidad.
Si no estáis siguiendo esta serie, os estáis perdiendo uno de los cómics mejor producidos de la actualidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario