Segunda parte de MALAS MADRES, que regresan con tema navideño y además con otras tres grandes actrices que hacen de respectivas mamás de las protagonistas.
Si pensáis que lo más peligroso en las navidades es tener un "cuñao" independentista es que no habéis visto el caos que supone para estas familias la llegada de sus progenitoras, que entran en la vida de sus hijas y nietos con la sutileza de un elefante.
Con grandes actrices como Susan Sarandon que interpreta a la madre rockera de nuestra depiladora "white trash" favorita, o Christine Baranski que encarna una maldad elegante y refinada que rivalizaría con la mismísima Cruella DeVil.
Una reflexión entre carcajadas del lugar que deberían ocupar las madres en las vidas de sus retoños ya maduros. ¡Seguro que se ven reflejados, y para mal!
Aceptémoslo: todas nuestras navidades terminan siendo un desastre, y viendo esta película nos parecerán perfectas por comparación.
Como bonus, el strip-tease de Justin Hartley, más conocido como el Green Arrow de Smallville.
¡Aciago destino el de los jóvenes actores que pierden sus papeles de superhéroes! Pero al menos aquí se lo pasó bomba.
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