viernes, 5 de abril de 2019

HARMONY. PRIMER CICLO.

Sabíamos que en el mercado americano abundan los autores que crean cómics con el único objetivo de que estos sean seleccionados por productoras y convertidos luego en series o películas.

Pues bien, esa parece también la intención de este gran volumen que recojer las tres primeras entregas de esta...serie.


¿Como podemos determinar dichas intenciones...? Pues por lo que se cuenta y como se cuenta: Tras un prólogo que muestra un enfrentamiento en tiempos remotos entre una raza de seres superpoderosos, análogos a los Dioses Olímpicos, la acción se traslada a la actualidad "desencantada".


De repente todo lo espectacular desaparece y la acción concierne a una jovencita "secuestrada" en una pequeña habitación -que está en una aislada finca- por un misterioso adulto que más bien PARECE querer protegerla, aunque ella, con amnesia, duda de todo y todos, sobre todo según comienza a descubrir sus poderes telequinéticos.


La búsqueda de la verdad y de su pasado es por lo tanto el argumento, uno dirigido hacia "JÓVENES ADULTOS", mejor si no están muy familiarizados con el manido argumento de "empresa de misteriosa gente malísima que captura a jóvenes con poderes para explotarlos", que es hacia donde acaba encaminándose la historia, ya decimos que muy pegada a la realidad y dejando las batallas divinas como un lejano "horizonte inexplicado".


Del trabajo de Reynès yo destacaría sobre todo el dibujo, muy detallado, con un delicioso punto cartoon que nos devuelve a las lecturas de nuestra infancia, y espectacular cuando es necesario.


El argumento, a nosotros nos resulta poco original y narrado con excesivo detalle, como si no quisiera llegar a la parte más interesante (y costosa de producir en la pantalla).

Pero como consideramos que se trata de una obra destinada a jóvenes lectores no dudamos de que ellos, identificados con los protagonistas, puedan disfrutarla mucho más.

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