Me parece admirable la imaginación de estos guionistas, Kirkman y Diggle, a la hora de seguir imaginando aventuras para estos personajes.
Por que, habiendo crecido con los superhéroes, uno siempre puede tirar del supervillano de turno, mezclar un dios antiguo con tecnología, aliens o un animal, y ... ¡ahí lo tienes, una aventura más!
Pero lo de liar una madeja de robos, asesinatos y timos se me antoja a mi una labor absolutamente distinta. ¿Hasta cuando se puede mantener esa narrativa sin dejar de ser -y parecer- "realista"...?
Por que crear personajes continuados en un ambiente noir es algo relativamente reciente. ¿Cuantas veces no se van a dar cuenta de que la chica es, de nuevo, LA MALA...?
Por otro lado, aunque los malos de estos cómics son absolutamente coloristas, tengo que reconocer que, de tomo a tomo, me cuesta seguir la narrativa, y saber quienes son los buenos y por donde va la historia. Una ventaja que si tienen aquí los inmediatamente reconocibles supervillanos de los superhéroes.
La historia, en definitiva, va de lo mismo de siempre: El Crimen No Paga, y los personajes se ven envueltos en una ola de muerte, persecución y venganza.
El Crimen No Paga, a menos que seas el protagonista de una serie como esta, donde siempre acabas siendo el más listo de la habitación...
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