Cuando Marvel Studios lanzó los Avengers no faltaron adeptos que la proclamaban -sin mucho sentido crítico- como LA MEJOR PELÍCULA DE SUPERHÉROES.
Así que no vamos a caer en el elogio fácil de decir que esta es la mejor película de Marvel Studios. ¡Lógicamente, debe serlo, han podido y debido aprender de todas las anteriores!
Sin necesidad de buscar el puesto en ningún ranking, la película es sin duda un magnífico pedazo de entretenimiento, y eso es lo que se supone que debe ser.
Tiene que ser tan buena o más como los Avengers, por que es de nuevo una película de un grupo de héroes, y ciertamente sin las incongruencias de la mencionada.
Mi línea favorita de la película es la que hace un inmenso chiste con la patética escena de la reparación de la turbina por Iron Man en la anterior cinta del grupo. Tanto los personajes del mundo de ficción como los productores van aprendiendo más y más de sus errores, y superándose. Y se ríen de ellos.
Es, como ya señalamos, la perfecta adaptación de los Ultimates de Millar y Hitch, con sus trajes de cuero, sus espías de S.H.I.E.L.D., sus bases, sus helitransportes, sus células de héroes "undercover".
Y como segunda parte del Capitán America, triunfa totalmente a la hora de actualizar al personaje, sacándolo de su origen en los '40, y metiéndolo de cabeza en el complejo mundo de las agencias, los gobiernos, la política y la información de hoy en día.
El tema de la película, Libertad vs. Seguridad, no puede estar más al día, aunque en vez de por Wikileaks se trate con Hydra, convenientemente ficcionado.
Chris Evans, con tres películas a sus espaldas, se muestra ya tan cómodo en el papel como Jackman en el suyo. Sabe combinar a la perfección los pequeños y entrañables momentos de comedia con las cruciales apariciones en que el Capi comanda legiones armado tan solo con un buen discurso.
Tiene la capacidad de evocar "héroe" aún cuando va de paisano, quizás en la manera en que solo Christopher Reeve lo pudo hacer. Reconozco que me puso la carne de gallina en más de una ocasión, y eso es muestra inequívoca de una gran película.
Fury hace de Fury, en este caso pasando a un segundo plano, por que lo de ir siempre trama que te trama tiene un precio, y es algo valiente por parte de Marvel Studios que se hayan atrevido a variar tan absolutamente una fórmula y unos papeles que estaban funcionando a la perfección.
Scarlett Johanson tiene también su mejor papel hasta la fecha, y hace mucha mejor pareja con el Capi que con Hawkeye o incluso Iron Man. Terriblemente diferentes, se convierten en una suerte de duo cómico, pero en el fondo los dos están muy solos en un mundo que no comprenden, aunque jueguen a que lo hacen.
Anthony Mackie completa el trío de héroes, y es la gran sorpresa de la cinta, por lo bien que se integra en el Universo de personajes, por lo simpático y bien escrito -como todos, todo el rato- que está su personaje y por representar más que dignamente a Sam Wilson, en lo esencial, como alguien preocupado por los más débiles de la sociedad. Y como perfecto aliado del Capi, claro.
En cuanto a Winter Soldier, a grandes rasgos podemos decir que su historia está suficientemente bien adaptada. Sin embargo, es quizás la que, comparada con el desarrollo que tuvo en el cómic, sufre más y hubiese requerido algo más de tratamiento y detalle. Al fin y al cabo, sabemos los lectores que el personaje no tiene casi nada que ver con el resto de la trama de la película, donde fácilmente pudiera haber sido sustituido por cualquier otro. El propio Batroc, que tan bien reflejado sale al comienzo de la cinta.
Puesto que Marvel Studios piensa continuar la historia de Winter Soldier, no dejamos de opinar que se han precipitado al introducirlo en el presente a la misma vez que despierta Stever Rogers. No obstante, se toman la molestia de mostrar que el Capi echa de menos a Bucky, aunque sean cinco minutos.
Sharon Carter, la Agente 13 queda un pelín relegada entre tanto superser, y su relación con Rogers tendrá que esperar a la cita que tienen pendiente en una próxima película.
El personaje de Robert Redford es a la vez lo más brillante y lo más decepcionante de la película. Brillante por que es un personaje real, plausible, que se mueve en ese mundo de Washington, de alta política y más alto espionaje.
Decepcionante por que -y este es quizás el talón de Aquíles de una película realmente invulnerable- los guionistas no han sabido aprovechar lo ambiguo del personaje y hasta la propia productora ha auto-spoileado sus verdaderas intenciones. Da igual, por que tal y como está planteado, poca duda queda de sus planes y lazos nada más comenzar.
Crossbones, si es que es ese su nombre, por que yo no me enteré en la peli de que se llamase así, es sin duda el "villano de tebeo" más cargante y poco original. No pasa de ser un secuaz en exceso pertinaz. No le habrán querido poner tibia y calavera por Punisher, pero es una de esas cosas que infantilizan la película.
La aparición de Arnim Zola, que a la vez sirve de puente con la película anterior y de homenaje a los orígenes tebeísticos de S.H.I.E.L.D., si que está bastante bien traída. ¡No se preocupen, no sale como televisor con manos y patas!
Uno de los mayores triunfos de la peli es representar a un SUPERHOMBRE en acción de manera creíble. Iron Man lleva armadura, Wolverine usa sus garras, pero cuando vemos al Capi en acción, se mueve, salta, pelea como un verdadero superhombre, animado por el suero que corre por sus venas, imparable, haciendo realidad el sueño de Kirby de un hombre que puede derrotar a una docena y salir airoso.
Los hermanos Russo realizan una gran dirección -con una escena inicial digna de una peli de Bond- de momentos heróicos, de acción trepidante, de peleas creíbles y de siniestros cambios de tercio. No es raro que ya los hayan fichado para la siguiente.
No quiero terminar sin resaltar de nuevo los magníficos diálogos, muchísimas líneas geniales, hilarantes, que informan, entretienen, caracterizan y hacen avanzar la trama, todo en uno. Y la banda sonora no está nada mal.
Y para concluir, decir que lo que menos me ha gustado de toda la película es la escena post-créditos, sin relación con todo el resto, metida con calzador, con estructura idéntica a otras que ya hemos visto y solo para dar paso a las siguientes cintas. ¡Hay que rascarse un poquito más la mollera!
Os emplazo para un futuro artículo analizando ya en detalle las fuentes y referencias a los cómics.
Si yo fuera Warner, no estrenaría NADA en la misma fecha que Captain America III. Ni en el mismo año, tampoco.
3 comentarios:
Tengo ganas de ver la peli, pero de momento soy médicamente incapaz de creerme a Chris como Steve Rogers. Siempre parece a punto de hacer un chiste, lo hubiera preferido como Ojo de Halcón.
Yo el problema que le veo es que siempre estar a punto de gritar "¡Llamas a mí!"
Pues para mi, nunca ha estado del todo mal, no me terminaba de transmitir el respeto que se supeto y presencia que se le suponen en los comics, pero se le perdonaba por que se trataba aun de un capi novato, no del lider establecido por años que vemos en los comics... y en esta pelicula, creo que pega el salto, y para mi ya es el personaje al 100%, me a convencido muchisimo. Sobre la peli, de acuerdo en casi todo contigo, Pedro. En lo unico que no coincidiriamos seria en que hubiera sido mejor dejar al soldado de invierno para mas tarde, para mi ha funcionado a las mil maravillas aqui: el que este relaccionado con el pasado de Steve, le da mucha mas fuerza e interes a todo que si fuera un mercenario intercambiable cualquiera, visualmente, queda demostrado que era una buena opcion para la imagen real, y el unico problema que habia, lo de dejar claro que era alguien importante para Steve sin que quede muy forzado, creo que si han sabido resolverlo bastante bien, asi que para mi, un acierto tambien eso. Como pegas, pondria el que los villanos tiendan a contar sus planes con tanta facilidad, que eso si queda un poco raro aveces, y la horrible voz que le han puesto a Zola en el doblaje, que sabotea un poco el guion, al no hacer que lo que nos cuenta suene como deberia.
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