ALAN DAVIS REGRESA CON VENGADORES: PRIME

El caso de Alan Davis es realmente extraño. Por un lado, es el autor que ha influenciado a mayor número de los actuales artistas de comic (no es que él a su vez no esté influenciado, por Adams o Ditko, claro).

Es terriblemente apreciado por muchos aficionados, pero ha fallado hasta cierto punto al convertirse en una estrella del medio, ya que sus proyectos muchas veces no terminan de vender.



Todos sus fieles nos alegramos al oir que regresaba con ClanDestine, pero el proyecto no tuvo ventas suficientes como para asegurar su continuidad. A pesar de que los números anteriores fueron reimpresos para la ocasión, Davis desaprovechó muchas páginas recapitulando la historia de la familia, y la verdad es que sus guiones carecían de la pátina de genialidad, humor y frescura con la que había introducido en su día a estos personajes.



Tras esto su único trabajo como guionista ha sido un especial de Thor bastante vacuo, en el que sólo se incluye una larga pelea y un homenaje a Asterix, además de contradecir flagrantemente la continuidad Marvel en torno a la Esfinge de Giza, tal y como la estableciese en su día Jack Kirby y Stan Lee.

Davis prometió recuperar a los ClanDestine (y continuar esa trama) en una serie de anuales en los que formaban equipo con otros personajes Marvel -para que así se mejorasen las ventas-, y en ellos sigue trabajando, según anuncia.

Pero desde el especial ha renunciado a seguir guionizando y prefiere centrarse en dibujar guiones de otros, en este caso, Bendis.



Mientras completa su proyecto, el único trabajo visible han sido portadas, como las de los 4F de Hickman. No muy halagador, a mi juicio, que un maestro como Davis haya quedado para servir de anzuelo de comics dibujados por artistas no tan brillantes como él...



Lo que es indiscutible es el valor del dibujo de Davis a la hora de reflejar a los héroes clásicos de Marvel y DC en sus versiones definitivas y definitorias, como ha demostrado en sus últimas obras, como JLA: El Clavo I y II o Fantastic Four: The End.



Sin embargo estos productos tienen un aspecto autocomplaciente, pues no dejan de ser "sermones para los ya convertidos", con los que Davis se ha apartado del mainstream y la actualidad comiquera para encerrarse en su propia torre de marfil de la Silver Age.



Regresa ahora como artista de tres grandes iconos Marvel que además son los personajes más en boga gracias a sus presentes y futuras adaptaciones cinematográficas (lo que supongo que ha sido un factor importante a la hora de aceptar este proyecto, y no es Davis el único autor que se arrima al sol que más calienta...).

Confiemos que esta miniserie le consiga al fin el favor del gran público a este "Artist's artist" y que, guionizando o no, en sus futuros proyectos abandone el mero recuerdo del pasado para marcar el ritmo artístico en la industria como corresponde a un gigante de su categoría.