ASSAULT ON ARKHAM: UN "SUICIDIO" EMPRESARIAL NO CONTINUARLA

Agradabilísima sorpresa me he llevado viendo esta película que, advirtámoslo ya, de Batman tiene lo justo: es una cinta del Suicide Squad de visita en el mundo de Gotham.

No cabe duda de que en DC/Warner confían en el concepto y por eso lo meten por todos lados, desde su relanzada serie New 52 -que mantienen a pesar de pésimos episodios-, a las apariciones en Arrow o esta misma cinta, "camuflada" de película de Batman.

Pues bien, no busquen más: los chicos de animación, a pesar de algún disgustillo que otro, han vuelto a dar en el clavo reproduciendo magníficamente el concepto que en los cómics generase John Ostrander, allá por los tiempos de Legends.

La película funciona desde la mismísima secuencia inicial, que muestra a Amanda Waller reclutando a los diferentes villanos en diferentes escenas que los definen y presentan perfectamente, una capacidad de síntesis de la que quizás podría aprender algo James Gunn.

La peli refleja a la verdadera y única Amanda "The Wall" Waller, obesa y maquivélica, y no las versiones descafeinadas que nos han querido endosar en New52 o Green Lantern.

Es bastante notable que esta es una película ALTAMENTE VIOLENTA, concebida para adultos y donde la sangre y las situaciones morbosillas son usadas sin ningún tipo de reparos.

Es de alabar que se haga este tipo de producto en animación y esta claro que se hace pensando en dar inmediatamente el paso a imagen real.

Cuestionable, no obstante, el recrearse en ciertos detalles gore que suelen estar fuera de lugar en el cómic de superhéroes, al menos el que no pertenece a la DC New 52.

Más que con la puntual aunque preciosamente oportuna aparición de Batman, la película refleja también con excelente acierto a los habitantes de Gotham y a su mundo, a los internos de Arkham y a los villanos habituales del Murciélago.

Pero por supuesto lo valioso de la cinta es saber dotar de vida y personalidad a los "villanos" del grupo, que quedan asi convertidos en anti-heroes y que acaban de iniciar un camino que sin duda tendrá mucho recorrido.

El código de honor de Deadshot, la locura inagotable de Harley, el fanatismo de Black Spider o el torpe oportunismo de Captain Boomerang.

Esta versión superheróica de "Doce del Patíbulo" queda perfectamente instaurada y, como siempre, solo pide cambiar los dibujos de animación por acción real. Si Marvel tiene a sus Guardianes, DC tiene al Suicide Squad, su propio "bunch of assholes".

Mención especial merece el papel del Joker, magníficamente caracterizado. Y es que la misión en Arkham se les va a acabar yendo "un poquito" de las manos, y el Joker se escapará para darse un terrorífico paseo por esos pasillos del manicomio.

Como en el caso de "Beware the Batman" es desarrollando a todos estos personajes secundarios cuando Batman cobra su verdadera dimensión.

Y de nuevo, este concepto de supervillanos que no solo sirven para que el héroe los detenga, sino que tienen vida más allá de ser detenidos por él, añade una nueva capa de complejidad al siempre cambiante mundo de los superhéroes. Una, ya decimos, totalmente adulta y para un público adulto.

Muy tontos han de ser en Warner si el proyecto de película en imagen real no está YA en marcha y con una de esas diez fechas aparejadas.

¡Si además en esa pueden romper todos los cuello que quieran!