martes, 26 de noviembre de 2019

DESTINO CAMELOT: REGRESIÓN FANTÁSTICA

El corazón del Hombre no está compuesto de mentiras... clama Tolkien en su más profundo poema, MITHOPOEIA.

Y sin embargo, viéndonos reflejados en todas y cada una de las producciones de cine fantástico que Francisco Javier Millán recupera y analiza en este volumen, uno llegaría a poner en duda cuanto quedaría de lo que somos si sustrayésemos de nuestro ser todo lo visto, aprendido y SOÑADO con estas películas.


Y es que el libro, subtitulado REINOS FANTÁSTICOS DEL CINE Y LA TELEVISIÓN abarca exactamente desde los años 80 a los 90, y eso solo recorriendo sus páginas profusamente ilustradas cuando nos damos cuenta de la cantidad de FANTASÍA en vena que nos inyectaron entonces.

Poca cosa más somos en realidad que el resumen y resultado de dichos visionados.


Por si no estuviéramos suficientemente hechizados con el contenido del mismo, el libro arranca hablando de EXCALIBUR (1981) de John Boorman.

Y es que no nos cansamos de descubrir nuevas cosas de esa versión del mito artúrico que, según pasan los años, se hace más completa, perfecta, insuperable...

¿La vimos con 11, 12, 13 años...? ¿Quizás después...?

En cualquier caso...¿no es esa la edad perfecta para ver TODAS LAS PELÍCULAS...?


Y así, el libro se desliza ágilmente por otras producciones como la "fracasada" Taron y el Caldero Mágico, El Señor de los Anillos de Bakshi y sus dos, muy poco conocidas, "secuelas" animadas.

Con Conan nos sumergimos en todos los pormenores de la producción, que tuvo lugar en España. ¡No hace mucho pudimos tener en la mano la cabeza del buitre animatrónico que mordía el héroe en su personal calvario!


Detalles como estos son los que el autor desgrana, sin olvidar las -valga la redundancia- INOLVIDABLES bandas sonoras de cada película.

Una parte particularmente interesante es descubrir las diferentes películas de bárbaros que generó el éxito de Conan, la Conanxplotation.

Henson con su Dark Crystal y Labirinth, Lucas con su Willow, La Princesa Prometida y Legends...


El libro incluye una parte final dedicada a series de animación para TV, de Dungeon and Dragons a los Osos Gummi, y curiosamente finaliza con Covintong Cross (1992), una serie en la que regresaba el recordado Nigel Terry, el Arturo de Excalibur, y que yo recuerdo ver ya en el piso de estudiantes de la Universidad, comiendo un bocadillo de lomo que compraba en un bar por que los domingos no venía la cocinera que nos atendía.


No diré que cada vez que veíamos una de estas películas salíamos del cine con una nueva comprensión del mundo, pues ahí el tiempo ha acabado demostrando que nos equivocábamos.

Pero no por ello dejaron de "imprimir carácter", cual pagamos sacramentos, y sin duda quienes lean el libro añorarán conmigo los tiempos en que creímos que el Mal podía vencerse simplemente derrotando con un rayo de luz a un Tim Curry maquillado hasta las cejas...


Aunque hayamos llenado todas las grietas del mundo

con elfos y duendes, aunque nos atrevimos a fabricar
Dioses y sus casas de oscuridad y de luz,
y hallamos sembrado semillas de dragones, era nuestro derecho
(usado o abusado). El derecho no ha cesado.
Aún creamos  por la ley en la que fuimos hechos.


J.R.R. TOLKIEN

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy interesante, quizá pueda caer en Navidad.

Sam