Mientras que el resto de cómics parecen no pasar por los mejores tiempos, en todos sitios te dirán que el Manga sigue subiendo sus ventas, y en el éxito de este sin duda su adaptación en Animes es fundamental.
Desde los primeros estrenos de largometrajes de animación en 1917, por los pioneros de la primera generación el libro se centra en los orígenes de la productora Toei -la "Disney" japonesa- hasta los años setenta en los que termina la etapa de su director Hiroshi Okawa.
El capítulo inicial, con dichos orígenes corre a cargo de Laura Montero, y trata la animación antes de la Guerra.
El resto se ocupa de la etapa post-Guerra poniendo la atención en la aparición del sistema de estudios y el reparto del trabajo de manera que este se llevase acabo de manera industrial, con los consabidos repartos de tareas.
Así, desde la influencia del arte y la ilustración japonesa en la búsqueda del estilo, a los posteriores cambios que trajo la llegada de la televisión, la llegada del discurso político en los años sesenta, las adaptaciones literarias de clásicos europeos, la diatriba del sello de autor en una creación colectiva, etc...
El pequeño príncipe y el dragón de ocho cabezas, Las Aventuras de Hok, principe del Sol o la adaptación de La Isla del Tesoro, ya en los años sesenta y setenta culminan este sesudo estudio que encontramos orientado a especialistas,
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