Tras la sorpresa que nos llevamos con EL ARTE DE CHARLIE CHAN y los premios que ha recibido, ni que decir tiene que esperábamos impacientes las nuevas co-ediciones de Amok y Dibbuks importadas del sudeste asiático.
Y este nuevo volumen no nos ha defraudado.
Kampung Boy no tiene el formato habitual de un cómic, siendo en su mayoría ilustraciones a toda página acompañadas de texto, pero esos detalles le resultarán totalmente irrelevantes al lector.
Lo verdaderamente interesante es que narra las aventuras de un pequeño niño malayo desde su nacimiento en su pequeña aldea hasta que la abandona para cursas estudios en un internado lejos de sus orígenes.
Obtenemos así una nueva visión de una realidad tan lejana como la vida en las pequeñas comunidades malayas, pero que esta vez nos resulta totalmente cercana, pues todas las infancias de los niños tienen mucho en común.
¿Quien no ha corrido delante de su madre para evitar un castigo tras una travesura o se ha marchado a jugar con sus amigos tras el cole...?
Kampung Boy lo hace y junto a el vamos descubriendo una fascinante cultura y un mundo natural estos si muy alejados de los nuestros, a pesar de los paralelismos sociales.
Les invito a descubrir las aventuras de este pequeño Tom Sawyer asiático que sin duda devorarán con la misma velocidad e interés que lo hemos hecho nosotros.
1 comentario:
Gracias Pedro.
Un saludo,
Enrique
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