lunes, 6 de diciembre de 2021

INJUSTICE: EL FRACASO DEL GÉNERO SUPERHERÓICO

Es todo culpa de Frank Miller. Me refiero a que fue el el primero en enfrentar a Batman con una ridícula, caricaturesca y deformada versión de Superman en Return of Dark Knight

Luego hasta el mismo echó marcha atrás, explicando en la secuela el extraño comportamiento de Superman, a las órdenes del gobierno, pero el daño ya estaba hecho.
 

Desde entonces, los otrora MEJORES AMIGOS DEL MUNDO se tornaron repetidamente némesis el uno y el otro. 

También en el Twilight Of The Superheroes de Moore, aunque el era lo bastante listo para saber que aquel oscuro futuro -uno que representaba todo lo malo que el mismo había traído inadvertidamente al cómic de superhéroes- solo merecía ser borrado para siempre. 
   

Y de ahí a Kingdom Come, donde vimos por primera vez al Joker matando a Lois y a Superman retirándose, aunque Waid fue bastante listo para que fuese Magog y no Superman el que matase al villano. 

De nuevo, Batman y su grupo terminaban enfrentados a Superman y el suyo con apocalípticas consecuencias.
   

No he tenido ocasión de leer INJUSTICE, principalmente por que no me interesó la premisa del SUPERMAN TIRANO (y menos aún los cambios de artistas a cada capítulo, ahora convertidos en norma de la agonizante industria comiquera). 


Pero el prólogo de animación que presentaba el mundo alternativo en el que se basaba un simplón juego de lucha tuvo largas y oscuras consecuencias, colándose de rondón hasta en la presentación de la Liga de la Justicia en el cine. 

Antes de formarse, el grupo ya estaba condenado. Malos comienzos.


El personaje de SUPERMAN tiene una definición muy simple: SIEMPRE-HACE-LO-CORRECTO. 

Hace poco apuntaba Morrison que si el mismo no se había vuelto malvado por la muerte de sus padres, duda mucho que el inmaculado Superman obrase de manera distinta.

Y no vale eso de "no le quedaba otra solución"; ese es el verdadero poder de Superman: encontrar siempre OTRA MANERA de vencer al villano y mantener sus principios. 
     

Una historia en la que Superman no lo logra tiene el mismo interés que una historia de Sherlock Holmes donde este no tiene ni idea de como detener al culpable. 

Un Superman que mata NO ES SUPERMAN.
   

Dicho lo cual, no diré que me ha gustado esta adaptación, cuya fidelidad al original desconozco, pero si que me ha agradado la manera en que los guionistas la han presentado.

Por ejemplo, al comienzo Superman sufre un ataque con gas del Espantapájaros cargado de Kriptonita, lo cual puede justificar -de aquella manera- que el personaje enloquezca y actúe de la manera en que lo hace.


Aunque ya se había jugado con los paralelismos entre Nightwing y Deadman, la idea de hacer análogos a los trapecistas me parece todo un logro, así como el papel de Dick Grayson para resolver la diatriba moral de Damian Wayne, unos temas muy similares a los que ando homenajeando en mis siguientes cómics para Big Bang Comics y que son la moraleja definitiva que debemos sacar: ¿DE QUÉ LADO ESTAMOS NOSOTROS? ¿Somos capaces de vencer nuestra propia herencia "malvada"?


También está bien llevado el apoyo de Wonder Woman a las medidas "pacifistas"  e intervencionistas de Superman que plantean una muy revelante cuestión en la actualidad: Con una sociedad globalizada, ¿hasta cuando pueden permitir unos países que en otros se vulneren los Derechos Humanos...? 

Hemos tenido un triste ejemplo en Afganistán, pero por desgracia hay muchos otros lugares similares o incluso peores. 

¿Está la Soberanía Nacional por encima del BIEN? Y eso puede aplicarse a cualquier tipo de grupo, de las bandas de barrio a las fronteras de los países, aun aquellos que no lo son y lo pretenden, TODO SON MAFIAS con intereses particulares que se oponen, por definición, a los generales.


Tal como la resumen, la historia parece bastante mermada. Notablemente ausentes están todos los personajes mágicos, que con sus poderes podrían rápidamente neutralizar a Superman.

Otros de moda como Harley Quinn se hacen con el protagonismo, y es de agradecer el papel de Plastic Man, que nos vuelve a recordar cuantos personajes tiene DC con increíble potencial que ya no se usan en ninguno de sus medios.


Finalmente me ha agradado la manera en la que el Superman es finalmente detenido, tirando de nuevo del ahora popular Multiverso. 

¡Al menos, al final vuelven a ganar los buenos! 

 Esta fascinación por el lado oscuro de los superhéroes dice mucho, quizás demasiado, de la sociedad en que vivimos y, creativamente, supone el FRACASO ABSOLUTO DEL GÉNERO, cuando los modelos ideales que debieran inspirarnos se tornan frágiles, vulnerables y fallidamente humanos.

Los superhéroes deben ser otra cosa. Humanos, si, pero SUPERHUMANOS. 
     

Según los PODERES QUE DIRIGEN EL MUNDO se vuelven más omnímodos, controladores, INEVITABLES, haciendo fracasar nuestro futuro, personal y colectivo, dando marcha atrás a la HISTORIA, reviviendo terrores ya pasados y sumergiéndonos en la más inimaginable de las Distopías, una que es totalmente real, la figura del HÉROE, super o no, habrá de redefinirse. 

Pero la manera de derrotar a esos muy reales villanos sigue siendo la misma de siempre: HACER SIEMPRE LO CORRECTO. 

Y primero, imaginar, como en el Multiverso, que OTRO MUNDO ES POSIBLE. También en lo que compete al Universo DC en todas sus manifestaciones.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Quizás esta fascinación por el lado oscuro de los superhéroes no sea sino una resonancia de la vulnerabilidad moral de una sociedad en perpetúa adolescencia que enaltece su indivualismo hasta el punto de anular la figura del otro, incapaces por tanto de concebir que existan héroes dispuestos a luchar por los demás y no sólo por sí mismos. Puede que para reconducir esta moral dañada se deba escribir héroes que sean buenos por ser buenos aunque esto no satisfaga las inquietudes comerciales del momento, o puede que ya no tengamos salvación...

ilustraciones juan serrano dijo...

Qué certero análisis. El tema de oscurecer a los supertipos se ha ido ya de las manos desde hace mucho tiempo. Se desnaturaliza el concepto del superhéroe, intentando hacer un género para adultos, como más serio, pero lo único que se hace es cambiar de genero: drama, thriller,terror........pero superheroico, poco.

Esteban "Chino" Decker dijo...

Cambiando de tema, puede ser que George Perez está muy enfermo y que le queden meses de vida?

Anónimo dijo...

Que paso con la crítica a the suicide squad?

PEDRO ANGOSTO dijo...

NO-LA-VOY-A-HACER.

Si eres tan amable de dejar ya de preguntar... GRACIAS.

Anónimo dijo...

Pero porque? Al menos se ve mejor que la snyder cut.

PEDRO ANGOSTO dijo...

Cualquier cosa se ve mejor que el Snydercut.

No me gustan los productos de esa productora, y no la publicito.

Anónimo dijo...

Creo que el error estuvo desde siempre, desde el preciso momento en que alguien en DC decidió que crear a Batman era una buena idea. Si la intención era hacer superhéroes para niños, ¿Por qué venderles a alguien como Superman por un lado y por el otro a Batman? ¿No es un mensaje jodidamente contradictorio? ¿O por qué hacer a Superman amigo de alguien así?

El problema fue ubicar a Batman en el mismo mundo ficticio que Superman y pretender que ambos fueran mejores amigos o colegas siquiera, pese a que el personaje del murciélago fue retratado desde el primer minuto como un gatillo alegre que mata sin miramientos. Además de ser como el agua y el aceite en muchos otros aspectos.
Si a Batman le hubieran otorgado la misma brújula moral que a Superman desde el día 1, ni siquiera estaríamos teniendo esta discusión, pero ahora todos los fanboys de la violencia gratuita pueden esgrimir la excusa 100% legítima de que "Batman era un asesino desde su primer aparición". Eso es lo malo, que la propia DC creó los medios para darles la razón desde mucho antes de que existiera esta moda de lo grim & gritty. Con cada día que pasa me convenzo más que el único Batman que de verdad funciona es el de Adam West. Incluso el de George Clooney me parece más acertado que muchos otros, pese a los muchos problemas argumentales de su película.

Y si Batman ya funcionaba bien tal cual como fue concebido, como un pobre infeliz, ¿Para qué cambiarlo al poco rato para volverlo un individuo de moralidad blanca? Lo hubieran mantenido como un héroe pulp, siendo otra imitación barata de The Shadow, y hasta ahí. Pero como siempre, nada es tan efectivo para nublar el buen juicio como la avaricia corporativa.

Detesto a Frank Miller tanto como cualquier otro (a estas alturas ya ni me creo que él haya escrito Born Again de Daredevil o la misma Year One de Batman, a fin de cuentas, en su día Bob Kane también se las ingenió para robarse todo el crédito por la creación de Bruce Wayne y tuvieron que pasar décadas para que nos enteráramos), pero reconozco que el tipo no es tan estúpido como aparenta. Al menos tuvo la suficiente perspicacia para ser el primero en darse cuenta de tan tremendo error y saber explotarlo a su antojo. Bueno, si no era él, más temprano que tarde aparecería alguien que notara algo tan obvio, tan sólo era cuestión de tiempo.