Abarcar las maravillas que encierran las ciento cincuenta y tantas páginas de este número de Delirio es imposible, pero sin duda variadísimos contenidos harán las delicias de cualquier aficionado, veterano o recién llegado que se adentre en ellas.
Comenzamos por destacar un relato del recientemente fallecido Ron Goulart, una de las últimas figuras del fandom clásico estadounidense que titulado Ignatz y tratando sobre gatos parece homenajear a la tira de cómics de Krazy Kat.
Nunca falta una selección de relatos de autores de las revistas de género americanas o de premios Nobel que también han escrito en esas coordenadas: Garret, Forester, Heming, Coppard, con títulos tan sugerentes como Puerta a Kal-Jmar o Adam y Eva...y pellizcame.
Todo acompañado con esas notas biográficas que incluyen el resto de su producción, por si la angustia de descubrir otro autor y otra obra que desconocíamos no fuera ya suficiente.
En el campo nacional se recupera el relato finalista de los premios Domingo Santos 2018 Que inventen ellos, de Aitor Solar. Más una semblanza de Carlos Buiza por Mariano Villareal, y otro relato del autor del mítico El Asfalto, adaptado por Ibañez Serrador en Historias para no Dormir.
Pierre Versins habla de los Relatos Verídicos de Luciano de Samosata, que para nuestra sorpresa fueron ilustrados por Beardsly, cuyos dibujos acompañan al texto.
Sam Moskowitz hace lo propio con la vida y obra de Robert Bloch, autor de Psicosis.
Y si todo esto no fuese suficiente como para tirarse leyendo ya todo el verano que se nos ha echado encima de sorpresa, los suscriptores reciben una separata que en esta ocasión incluye el primer relato de EL MISTERIOSO DOCTOR CORNELIUS, uno de los primeros y más notables MAD DOCTORS.
Conclusión, que para dar cuenta de tan pantagruelesco menú de lecturas vamos a necesitar más de cinco semanas en globo o en dirigible.
¡Y esperemos que no sea Robur el que pilota este en el que nos hallamos, que con las prisas nos hemos montado sin preguntar!
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