AFTER: ALMAS PERDIDAS

¡Ea, pues ya tenemos aquí la tercera entrega de los amores de Hardin ("soy un chulazo malote pero con alma de poeta") y Tessa ("soy superpija pero me gusta que los chulazos malotes me pongan mirando a Cuenca")! 

El padre alcohólico de Tessa reaparece para complicar las cosas...¡Y se lleva a Hardin -también alcohólico- de copas! Se masca la tragedia...

   

Tessa prepara su mudanza por trabajo a Seattle y Hardin se muestra enfermizamente celoso...¡hasta de los camareros! ¡Para que aprendan las nuevas generaciones, si señor, como si no controlasen ya bastante!

   

Polvete en el Jacuzzi, en el Gym...¡hasta en la cama! 

Te quiero, no me quieres... y así se nos va la película que ha dado otro significado a la palabra CULEBRÓN.

   

Vanas esperanzas de los que creíamos que sería una trilogía, termina en continuará y con un cliffhanger de esos que hacen época, cuando, en un homenaje a Star Wars, uno de los personajes le confiese a otro aquello de "YO SOY TU PADRE". 

 El grito -silencioso- lo dimos los espectadores, claro.