jueves, 23 de agosto de 2018

ALPHA: NO LO INTENTEN EN CASA

Aventura juvenil que recupera el género de las "fantasías prehistóricas", uno que ultimamente parece volver cada pocos años.


Ya no hacen falta los bichos de Harryhausen con la CGI, y el que descubrió que con un abrigo de cuero -que parece comprado en Bershka- lo mismo puedes hacer pelis trogloditas que del Rey Arturo, merece un monumento.


En este caso se especula sobre el crucial momento en que el hombre comenzó a domesticar animales, empezando por el lobo.

Ahora, mientras que creemos que en realidad lo haría a partir de juguetones cachorros, la peli propone la amistad entre un niño bastante flojeras y ñoño, el primer animalista, al que le da pena matar hasta a los animales que tiene que comer, y un lobo HECHO Y DERECHO, que sin mucho motivo pasa de querer merendárselo a ser su mejor amigo.


Separado de su tribu el niño solo tendrá por compañero al lobo y viceversa en una película cuyo fuerte son los salvajes escenarios de la acción, disfrutables aún con los incontables anacronismos en los comportamientos o ese lobo que se pliega a la voluntad humana un poquito rápido, quizás por que en realidad, es un animatrónico un poco oxidado...

¡Ya saben lo que dicen los del cine de trabajar con niños y/o animales...!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y aparte la PETA denunció esta película porque despellejaron vivos a unos bisontes. ¿La respuesta que recibieron? "Son mis bisontes y hago con ellos lo que me da la gana".

Por favor que alguien me diga que eso último fue real XDXDXD