ESPÍA DEL REY: EL ENIGMÁTICO CHEVALIER D'EON, POR EDNA NIXON

Tengo que confesar que es tan brillante el prólogo que Alfredo Lara, con su sapiencia literaria, realiza sobre este singular personaje, equiparándolo a otros espadachines de ficción como la Pimpinela Escarlata, Scaramouche o los personajes de Dumas que la increíble biografía del mismo palidece un tanto ante tan brillante semblanza.

El Chevalier D'Eon estuvo al servicio del rey Luis XV de Francia y su servicio secreto -o administración alternativa "El Secreto del Rey". 

Poseedor de una fisonomía andrógina, llegó a infiltrarse en la corte rusa como dama de compañía de la Zarina.

Culto, de fuerte carácter y experto en economía y relaciones internacionales, a pesar de su físico afeminado el Chevalier parece haber sido el mayor espadachín de su época por su maestría en el esgrima. 

La crónica de sus logros diplomáticos no deja de tener una curiosidad histórica y cualidad literaria, pero la lectura de su biografía nunca podrá hace justicia a un personaje que, como explica el prologuista, se adelantó a su tiempo en cuanto a la definición de un nuevo estatus de género. 

Sus aventuras piden a gritos ser noveladas y hasta continuadas con nuevos, imaginarios episodios.

Por lo tanto, este libro con su vida real probablemente no sea más que el primer capítulo que inspire a amantes del género de capa y espada nuevas correrías ya totalmente ficticias.