Una obra dibujada por Raymond habría que recuperarla aunque no la guionizase Hammett, y una obra guionizada por Hammet habría que recuperarla aunque no la dibujase Raymond.
¡Así que imaginad que "incunable" supone este inmenso volumen donde no solo coinciden los dos, sino que además cuenta con la colaboración de Leslie Charteris, el creador de The Saint!
Yo desconocía que el maestro del Noir era quien estaba tras la creación de esta seminal tira de prensa, que el escritor llenó de esas fatales mujeres de sus novelas, esos héroes más duros que duros, pero con corazoncito, esos ambientes sórdidos, esas familias ricas llenas de secretos...
La tira además se lee excepcionalmente bien, pues no tiene esa estructura de repetir la última viñeta de la anterior en la primera, por lo que la trepidante acción fluye sin parar.
Nos damos cuenta ahora que el repeinado agente Corrigan está a la base de docenas de personajes de cómics, esos millonarios aventureros, esos justicieros callejeros, algunos de los cuales pronto tomaron máscaras y demás parafernalia del superhéroe.
De Bruce Wayne a Jim -Spectre- Corrigan, de Manhunter a Tex Thomson, todos salieron de aquí.
Los gangsters que dibuja Raymond en estas páginas pueden rastrearse no solo por los cómics sino con seguridad por buena parte de la ficción popular americana de las dos siguientes décadas.
Se les reconoce aún en el Superman de Wayne Boring, décadas después.
Si no os han convencido estas razones para haceros con el, el volumen cuenta con una magnífica introducción poniendo en relieve la importancia de la tira de prensa, que es al crimen y la aventura lo que la de Flash Gordon a la CF.
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