Sin embargo, claro, lo que perdimos en agilidad y diseño lo ganamos en atmósfera.
Las sombras regresaron a Gotham y con ellas trajeron vampiros, como Dala y el Monje, recuperados por primera vez desde la Golden Age. Hasta Bruce acabó luciendo colmillos...
Las tintas de Janson, que alternaba con las de Miller en Daredevil le daba un toque realista y actual a los personajes de principios de los '80: Interesan mucho más Bruce Wayne y el resto de personajes de paisano que cuando se ponen la capucha y lo joden.
Villanos olvidables y olvidados, subplots políticos y policiacos que Gerry Conway comenzaba a introducir en los cómics DC como heredados de su etapa en Spidey; esta etapa es una de esas que restablece el status quo, con Robin regresando al lado de su mentor, Vicky Vale reapareciendo, el Mad Hatter original revelando que el anterior era un impostor, y como no, el retorno de Manbat, para que Colan se luzca.
En cualquier caso, el tomo merece mucho la pena, aunque sea solo por ver las veces que se intenta recuperar la esencia de un personaje para perderla poco después.
La lectura se hace algo difícil pues solo incluye los números de Colan y por entonces él saltaba de Batman a detective, y lo mismo hacían los subargumentos.
Pero se nota el esfuerzo por modernizar al personaje para los '80, para competir con una Marvel que comenzaba sus años gloriosos. Y tiene un gran valor histórico observar al Batman pre-Crisis antes de que Miller lo revolucionara para siempre.
Son estos cómics con los que Ediciones Zinco comenzó su edición del personaje poco después en España y es una señal inequívoca del paso del tiempo que los tebeos que en su día comprábamos en el kiosco (o cambiábamos pagando el duro de rigor) ahora son recopilados en formato de lujo.
El cómic se queda en un momento álgido, con la introducción del ya rebelde (y pelirrojo) Jason Todd y la nueva ameaza de Nocturna... Habrá que esperar al siguiente tomo.
Y el momentazo sin duda, para los que siempre hemos conocido un simpático Bullock aliado a Gordon, es ver como el personaje fue introducido en su día como un poli corrupto sobornado para hacerle la vida imposible a Jim, que se salió del cuerpo y abrió una agencia de detectives con Jason Bard...
Subargumentos que ahora nos parecen de culebrón pero que sin duda habían estado ausentes en la DC anterior, donde todas las historias era autoconclusivas hasta poco antes.
Y junto a estos cómics, también reeditados por Planeta en B/N, habrá que conseguir los tomos dedicados a Don Newton, y seguir cubriendo huecos, ahora que no tenemos que gastar nada en el presente de la editorial.
4 comentarios:
¡Qué buena pinta tiene! A ver si los traen a España..
Caramba, Pedro, algunas de tus frases son auténticos disparadores de recuerdos (como la magdalena de Proust en 'En busca del tiempo perdido').
'...Los tebeos que en su día comprábamos en el kiosco (o cambiábamos pagando el duro de rigor)'...
Ha sido como montarse en una máquina del tiempo, y retrotraerme 25 años atrás, junto con una avalancha de recuerdos. Efectivamente, los tebeos también se cambiaban en los kioscos, aunque hoy a los chavales jóvenes que sólo conocen las librerías especializadas les suene raro. Ya ni me acordaba de algo así (maldito Alzheimer).
También me ha evocado aquellas mañanas de los Sábados y los Domingos, con 8 o 9 años, en que uno quedaba con los amigos para intercambiar tebeos, (recuerdo que yo los guardaba en los cartones de detergente vacíos que le sobraban a mi madre para que no se doblaran), a veces incluso a cambio de juguetes.
Esta es una de esas cosas por las que merece la pena leer tu blog. Cual Morfeo, me has hecho recuperar una de esas islas perdidas que habitan en los márgenes del sueño...
Coincido contigo en lo idóneo de recuperar estos números de Batman, puesto que tienen un nivel de calidad elevado, incluso 30 años después de su publicación. En cuanto a lo de la capa y que Colan no sabía mover a Batman, estoy de acuerdo a medias. Colan estaba más acostumbrado en Marvel a mover personajes como Capitán América o Daredevil, ciertamente más rudos y acrobáticos de lo que suele ser Batman, y menos estéticos en sus maneras. Este personaje, además de ser un gran luchador, debe distinguirse por la ELEGANCIA y GRACILIDAD de sus movimientos, y en eso es cierto que flaqueaba Colan.
Sin embargo, con la capa, habría que hacer una distinción entre las secuencias de acción y las secuencias estáticas. Es cierto que en las secuencias de acción la capa parece un elemento extraño, sobrante para Colan. No sabe moverla (ni el Capi ni Daredevil llevaban capa). Por otro lado, en aquellas escenas en que Batman aparece en reposo (como en la última ilustración de esta entrada), nunca había proyectado el personaje un aura tan majestuosa (ni siquiera con Neal Adams). Batman se arrebuja y se envuelve en su capa con la elegancia con la que lo haría el mismísimo conde Drácula, o flota y se desliza con ella con la etereidad con la que lo hace el Doctor Extraño (personajes elegantes con capa que Colan ya había dibujado previamente en Marvel).
Las generalizaciones son injustas. Por eso intento esforzarme en las matizaciones. Lo que sí es completamente cierto es que la serie ganó en atmósfera siniestra.
Creo que Marvel se equivocó al dejar marchar talentos como el de Colan a DC. Este es uno de los peores puntos negros de Jim Shooter en su etapa al frente de Marvel, la gestión de los talentos veteranos (peor incluso, a mi entender, que su fracaso con el Nuevo Universo). Gente tan válida como Roy Thomas o el propio Colan, por nombrar unos pocos, que abandonaron la editorial por discrepancias PERSONALES con el editor jefe.
Jim Shooter ya es de facto el mejor editor de la historia de Marvel. Si tan sólo hubiera tenido un poco más de mano izquierda, hubiese entrado en la historia como una leyenda del cómic, y tal vez incluso siguiera hoy día al frente de Marvel.
Mano izquierda...
Es cierto lo que dices de Colan, tanto lo bueno como lo malo. a mi la verdad, que por mas que suelan ponerlo al nivel de otros dibujantes miticos de Marvel (por que lo asocio mas con marvel, aunque hoy hablemos de un comic dc), siempre ha estado muy lejos de gustarme como un Romita, un Dikto o un Buscema, con posible excepcion de dracula, que se adaptaba como un guante al dibujante, dandole a dibujar justo lo que mejor sabe hacer.
Por lo demas, decir que tengo estos comics comprados en kiosko, pero en unos bonitos retapados de zinco... vamos, que soy viejo, pero no tanto como para tenerlos sueltos en grapa... por poco :P
Me hago cruces con algunas de las cosas que decis del Maestro Colan, pero no puedo dejar de estar deacuerdo en todo lo demas.
Que tiempos aquellos!!!
:_(
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