Insistiendo en los "greatest hits" de su coherente y pesimista discurso, Pérez-Reverte insistió en la necesidad de conocer este episodio de nuestro pasado para entender el presente, aunque retrotrajo a siglos de atraso el mal endémico que el mantiene es connatural a la condición española.
La solución o el consuelo ante lo inevitable solo puede venir de la Educación y la Cultura, sin que faltaran los coloristas epítetos para los políticos que parecen haber liquidado ambas, según el autor, más por ser idiotas que por ser malos.
Advirtió también de que hay que estar preparados para el futuro y los imparables cambios que se nos viene encima a todos los niveles.
El librito es una pequeña pieza de colección bibliotecaria en la que, en breves capítulos, se nos resume la sangrienta E INEVITABLE contienda desde el punto de vista de los hechos, intentando no valorar ni calificar a los protagonistas.
Orientada al lector juvenil, las ilustraciones de Fernando Vicente, los sucintos textos y hasta el pequeño formato le otorgan un aire de libro de texto de mediados del siglo pasado, de los que usaban nuestros padres cuando estudiaban "Historia Sagrada" o el Catecismo de Ripalda, salvando las distancias.
Sin minusvalorar el trabajo de Pérez-Reverte, para cualquiera con sensibilidad artística este es el libro de Fernando Vicente.
Las ilustraciones del autor, sean en vivos o apagados colores, le otorgan al proyecto unos aires de cuento fantástico, de esos que nos fascinaban de niños y que repasábamos una y otra vez.
El horror de la contienda, sin duda reflejado en ellas, lo es con una exquisita elipsis, que hace que todo se digiera sin morbo ni violencia, como si se tratasen de ilustraciones de míticos episodios bíblicos.
Por último no podemos dejar de recomendar, PARA TODOS LOS PÚBLICOS, como el mismo libro, la impresionante exposición que reune en el Museo ABC de la Ilustración todos los originales de la obra y que, acompañados de oportunas sentencias del libro, lo resumen a la perfección.
Llévese dinero, que luego el visitante querrá adquirir el volumen si o si.
1 comentario:
Maravillado con el inmenso arte de Fernando Vicente. Qué fabulosa homenaje a la cartelería propagandística, en ocasiones de una belleza expresiva brutal independientemente del proselitismo (que lo conecta ineludiblemente con el arte sacro -es una opinión personal-).
Resumiendo, tiene que ser una auténtica gozada. Gracias por estas fotos.
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