El libro es sin duda el más voluminoso estudio editado en España sobre Holmes, y escrito por un autor español, de Albacete para más señas, donde por mucho que nos lapiden las puertas de la Bibliotecas, siempre encontramos las mañas para vencer los obstáculos del sabio Frestón.
Como leéis en la portada, 628 páginas de nada, con innumerables ilustraciones que valen su peso en oro por lo rebuscadas y sugerentes para los profamos que, pasito a pasito, nos adentramos en el ciertamente inabarcable mundo de Sherlock Holmes y sus continuaciones, derivados, homenajes, y no menos interesantes ensayos sobre su mundo y otros mundos vecinos.
Una primera parte del libro se centra en investigar en que momento comenzaron las ediciones de las primeras aventuras de Holmes en España.
Seguro que el lector se asombrará al descubrir el pronto éxito del Detective en nuestro país, y la multitud de obras teatrales y hasta zarzuelas que protagonizó, acaparando todos los mayores teatros.
De los muchos tempranos pastiches de Holmes está una famosa serie escrita en Alemania en donde se encuentra una aventura que sitúa a Holmes en Granada, entre bandidos, pintores y toreros, y cuya crítica por parte de un granadino contemporáneo no tiene desperdicio.
Tras analizar los pastiches españoles, el grueso de la obra contiene reseñas de los más variados pastiches que se han escrito sobre Holmes, los mejores y más importantes de ellos al gusto del autor, todo un iceberg por descubrir del que el Canon de historias de Conan Doyle es solo la punta, claro.
Y entre ellos, sin duda, los más curiosos y memorables son los que cruzan a Sherlock con otros personajes, históricos o de la literatura. A pesar de la herejía implícita en estos cross-overs, no cabe duda de que son los que los aficionados a la literatura de género más agradecemos.
Por último, el libro contiene algunos ensayos sobre Mitología Creativa: el arte de cruzar a los más recónditos personajes de ficción y construir con ellos un mundo conexo, a la manera de Farmer o Alan Moore.
Decíamos al comienzo que libros así nos facilitan la vida. Pero lo cierto es que también nos amarga el descubrir tantos libros imprescindibles que añadir a nuestra particular lista.
Pero es un gozoso sufrimiento que nos augura cientos de horas de buenas lecturas y la posibilidad de que algún día sean nuestras obras las reseñadas en algún futuro volumen.
No dejen ustedes de visitar el blog de esta eminencia en Holmensiana, que a la vez escribe sus propios pastiches, entre otras obras que no desmerecen para nada las que el mismo reseña.
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