Pero cuando las obras en un suburbio de Londres despiertan toda una invasión de monstruos fantásticos la cosa se vuelve muy literal...
Las pandas del barrio domestican y controlan a los bichos, usándolos como montura y llevando a un nuevo nivel su rivalidad.
En este escenario, la relación de dos amigos se verá alterada cuando uno se eche una nueva novia.
Pero sobre la novia, que ha escapado de su rica familia de constructores, hay una recompensa, y ahora todos los grupos van tras ella.
Interesante premisa que no deja de incluir bastante dosis de crítica social bajo toda la fantasía.
Los protagonistas -y suponemos, el autor- son hindúes, por lo que saben de lo que hablan sobre los suburbios londinenses y sus bandas, aunque lo cuenten en clave fantástica.
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