DC THE BUTTON: HACIENDO CHAPAS

DC tiene un problema, y ese problema NO ES EL 3%.

No solo recurren a las ideas más disparatadas y tabú a la hora de introducir argumentos que llamen la atención de sus lectores sino que, muchísimo peor, LO HACEN SIN-PLAN-ALGUNO.

Lo sabemos ya de viejo, lo que nos sorprende es que haya lectores que sigan picando, intentando alcanzar la zanahoria que cuelgan delante de ellos.

Ya el hecho que durante la publicación de este evento hayan aparecido docenas y docenas de artículos -ENCARGADOS EN SU MAYORÍA- intentando que los lectores "descifren las claves" de esta primera continuación oficial de REBIRTH indicaba que el cómic, en si, NO TENÍA SENTIDO ALGUNO.

Si lo tuviera, claro, sobraban los artículos.

La chapita de Watchmen en sí se convierte así en el McGuffin definitivo, y mientras que el lector espera que se de alguna razón para la aparición de esta en la Batcueva, la historia pronto deriva en un improbable encuentro entre Batman y su versión Flashpoint, la de su padre.

Creo que la surrealista irrupción de las Amazonas Flashpoint en la Batcueva Flashpoint resume perfectamente la vacuidad y VAGUERÍA CREATIVA de los cuatro números.

Hasta el propio Flash se pregunta: "¿Como podemos volver a Flashpoint si no era un mundo alternativo sino una alteración de nuestra línea temporal...?"

Pues muy sencillo: NO ESTÁ SECA LA TINTA DE UNA SENTENCIA SOBRE LA COSMOLOGÍA DC, CUANDO YA SE ESTÁ ESCRIBIENDO OTRA QUE LA CONTRADICE FLAGRANTEMENTE.

Jugar con la nostalgia, dos flashbacks y medio al pasado, al pasado de cuando los cómics eran buenos, no contar nada o contar algo totalmente distinto que, en definitiva más que vender estos cómics VENDA LOS SIGUIENTES.

Los siguientes si, en esos YA EXPLICAN TODO, TODITO, TODO. ;-)

Un contínuo DAEMON EX MACHINA donde dioses y dioses aparecen y desaparecen de escena no para concluir el argumento, sino para estirarlo un poquito más, a ver si Geoff Johns tiene un ratito libre tras "salvar" DC Films.

El ápice de guionista que llevo en mis venas se revela ante semejante juego de trileros argumental.

Compadezco a los profesionales que tengan que ganarse la vida tecleando las "ideas" del Doctor Manhattan de turno.

Lo que siento como fan y lector, ya no lo digo, que hay niños leyendo.

Pero tenía que escribir esto, como Sabina.