lunes, 13 de mayo de 2013

SUPERHÉROES: UNA MODERNA MITOLOGÍA (I)

Escribía la semana pasada sobre Superhéroes y Bellas Artes, en realidad como una introducción a la presente reflexión.

Se habla muy a menudo sobre "Superhéroes como una moderna mitología", pero quizás de tanto oírlo nos hemos acostumbrado a tomar el significado más plano de de semejante afirmación.


Obviamante, los cómics de superhéroes son, como los mitos, relatos fantásticos de seres con poderes "sobrehumanos".

Los supergrupos, un Olimpo de nuevos dioses, cada cual con su parcela de realidad a cargo.

Los supervillanos, los representantes de las fuerzas de la Oscuridad, siempre acechando y siempre siendo rechazadas.


Pero como sabe cualquiera que haya leído un poquito sobre mitología, las narraciones de la antigüedad no solo tienen esa función "literatura popular antigua" sino que componen toda una particular visión de la realidad, alternativa o complementaria a la que la "razón cartesiana" ha desarrollado en los últimos siglos.

Los mitos son el lugar donde se manifiesta lo Divino, lo Sagrado, lo Totalmente Otro, la recopilación de las más altas aspiraciones del Espíritu Humano, así, por supuesto, como de sus más bajas pasiones.


Y junto a los grandes poemas épicos y los libros sagrados, el Arte, en este caso, el Arte Sacro, nace unido a estas representaciones simbólicas, preternaturales.

Desde las pinturas rupestres que representan a la Gran Diosa Madre y su consorte el Toro, hasta las enigmáticas y sugerentes figuras del arte egipcio, cuyas fantásticas mezclas de animales y humanos inspiran directamente los actuales personajes del cómic americano.


Estos dioses y su singular representación no solo remiten a la divinidad, a lo simbólico, a aquello sobrehumano, o lo que está fuera de lo ordinario, sino que representan el medio, el lugar, el hogar donde estas criaturas habitan.

Ese mundo "alternativo", el Duat, lleno de peligros, que la Barca de Ra recorre durante la noche, para emerger como el Sol al amanecer.


En palabras de Alan Moore: "Hay un sitio donde no se puede dudar de la realidad de los Dioses, y ese es la Mente Humana".

El autor por supuesto considera que la Creación, la Poiesis, la Poesía, es el más alto acto de Magia: Crear cosas, no de la Nada, sino de nuestra mente, de nuestro Espíritu, del Mundo de las Ideas, de la Inmateria.


La representación gráfica de estas figuras portentosas suponen un JERO-GLÍFICO, una escritura sagrada, un secreto a develar, un símbolo de una cosa más grande que solo se puede evocar a través de la "mentira" de la "Ficción", o en este caso, la "plana" representación artística, usando al Hombre a la vez como Medida de Todas las Cosas, y como parcial recipiente de algo más grande que él.


Sin que sea necesario rastrear la raigambre judía de Siegel y Shuster, y los mitos bíblicos que actualizan en su Superman, se puede trazar una línea directa, no tanto de lo Religioso, Divino, o Espiritual, como de lo símplemente "Fantástico", desde las grandes representaciones mitológicas-religiosas (y entendemos, claro, las representaciones judeo-cristianas como una mitología más) hasta los superhéroes que leemos todas las semanas.


Los Santos cristianos, en muchas ocasiones antiguos dioses paganos asimilados, con una ténue pátina de ortodoxia, forman en el cielo un nuevo Olimpo, cada cual con sus particulares símbolos, sus áreas de influencia, sus lugares de culto.

De hecho, en la historia de la ficción, solo la historia "Los Sietes Santos de la Cristiandad", que une a patrones de siete naciones, es un antecedente, y parcial, a la reunión de los ocho superhéroes que forman la Justice Society of America y fundan los Universos superheróicos de ficción.


Y si revisamos a sus miembros originales, decir que no son más que avatares de deidades es decir una inmensa obviedad: Hawkman, encarnación directa de los dioses halcón egipcios, juega con el concepto de reencarnación. Flash, un moderno Hermes, con su iconografía incluída. Doctor Fate, representante de la magia caldea. Spectre, un ángel vengador enviado por el mismísimo Dios. Sandman, encarnación de los mundos oníricos. Green Lantern, originalmente basado en las fantasías orientales de las Mil y Una Noches. Y a ellos se siguen añadiendo Amazonas sacadas de los mitos griegos, etc, etc, etc...


Los superhéroes no solo continúan los antiguos mitos: Más allá, los recopilan, los re-combinan, los racionalizan y ordenan, los sintetizan y los continúan, en una eterna actualización, tan cíclica como las Edades Heróicas de Hesiodo.

Con el paso de la historia, los Libros Sagrados dejarán paso a la Literatura de Caballerías. Y ahora sabemos que en realidad se tratará de los mismos viejos dioses célticos pasados por el filtro cluniacense quienes cabalgarán junto a Arturo.


Barbudos mentores, como certeramente apuntó Morrison en su día, conducirán tanto al inocente Percival como a Billy Batson. Uno buscará el Grial, otro la Palabra Perdida.

La misma imagen de la Tabla Redonda, símbolo del Mundo y de la misma Última Cena servirá para reunir en torno suyo a los superhéroes.


Pero en las ocasiones en las que la imagen se independiza de la palabra, como en los códices alquímicos medievales, lo artístico, lo pictórico, el dibujo que es un símbolo, el significado velado, actúan directamente sobre nuestra psique, y sus diferentes personajes, animales, criaturas sobrenaturales, conforman un mundo aparte, irreal e ideal, con sus propias leyes irracionales.


Esas claves simbólicas se transmitirán a su vez a buena parte de la pintura que arranca del Renacimiento. Heterodoxos artistas multidisciplinares grandemente influidos por el descubrimiento del mundo clásico, Hermético, que se ve como una verdad pretérita anterior al Cristianismo.

Filosofía que incluirán tanto en el Arte Sacro como las imágenes de antiguos dioses clásicos.

La intención de la mayoría de artistas, de los grandes artistas, no es representar algún relato fantástico olvidado, sino simbolizar algún secreto o significado encerrado en la fábula original.


En los cómics, la obra de Sandman, fantasía encarnada, o imprimida en celulosa, reflexionará profundamente tanto sobre la supervivencia de estos relatos y las diferentes formas que adoptan a través de la historia como de los efectos psico-lógicos que estos tiene en la compleja alma humana de sus protagonistas y, claro, de sus lectores.


Obras como esta difuminan absolutamente cualquier frontera que que alguien quiera instaurar entre Mitología, sus funciones y significado, y los modernos, GRANDES, Cómics de Superhéroes.

CONTINUARÁ...

9 comentarios:

Hombre de Trapo dijo...

Por cierto, Pedro, hablando de mitología. ¿Le has echado ya un ojo al 'Baco' de Eddie Campbell? Astiberri se ha decidido a publicar la serie íntegramente en nuestro país.

“Baco mezcla secuestros de aviones y antiguos dioses, culebrones de mafiosos y leyendas, investigaciones policíacas y mitos fantásticos, limpiadores de piscinas y literatura clásica. No debería funcionar, por supuesto, pero funciona de maravilla”.
Neil Gaiman.

“Un estilo gráfico único, una historia intrigante y bien armada; personajes cautivadores y
completamente verosímiles; un trasfondo de humor, sarcasmo e ironía; una doble lectura llena de
realismo político y social; una interesante investigación histórica; y, sí..., superhéroes. Baco es una atípica historia de superhéroes contada al estilo épico griego”.
Chris Staros, The Staros Report.

“Todo aquel que se anime a probar la serie repetirá. Atrapado por la carnosidad y acidez justa de su
trama, la finura y armonía de su trazado, y su elaboración armónica. Sensaciones que persistirán
una vez apurada la última gota de su lectura”.
Nino Ortea, Tebeosfera.

http://hombredetrapo79.blogspot.com.es/2013/05/baco-de-eddie-campbell-astiberri.html

PEDRO ANGOSTO dijo...

Pues no, no lo he leído, pero con la publi que les has hecho ya puede mandarme uno los de Astiberri jjj

Koko Ramos dijo...

Vaya Pedro!, tal como lo has escrito parece que Mr. Moore fuese seguidor de Platon de toda la vida, recreando conceptos extraidos del mundo de las ideas.

A pesar de ese platonismo, gran articulo, y con mucha razon en gran parte de lo que dices.

PEDRO ANGOSTO dijo...

De toda la vida no lo se, de los 40 para arriba, si.

Y cuando hizo Watchmen, también, aunque quizás el no lo sepa aún...
;-)

Thadeus dijo...

Muy interesante la reflexión, pero a no ser que seas bilingüe catalán arregla ya ese "los re-convinan" que hace llorar al niño jesus/superboy.

PEDRO ANGOSTO dijo...

Creo que ya he cometido en el blog TODAS LAS FALTAS DE ORTOGRAFÍA POSIBLES.

Pero ¿me se entiende, verdas...?

Thadeus dijo...

Klaro,onvre. Me ha parecido gracioso lo de la "Liga de religiones" XD Igual es que los que son superheroes son los dioses, que comparten poderes y no a la inversa :D

Víctor Ibáñez dijo...

Buen artículo.

PEDRO ANGOSTO dijo...

Gracias Victor!!

Ahora ya se por qué eres dibujante y no guionista! ;-P