Ilustrado a todo color, no hemos podido evitar la nostalgia de recordar cómo nos iniciamos con ellos en los primeros 90, cuando estudiábamos en Granada, y formamos parte de una "Comunidad" ahora casi perdida pero continuamente añorada, a la que deseamos regresar.
Víctor comienza por reseñar el juego de El Señor de los Anillos, que tantas horas de aventuras, compañerismo e hilarante placer hasta el agotamiento nos proporcionó junto al resto de La Compañía de la Estrella Solitaria, nuestro grupo émulo de los del Anillo.
Pero a continuación habla del resto de juegos de la época, que marcaron tanto o más a toda una generación de roleros: Star Wars, James Bond, La Llamada de Cthulhu, Paranoia, Vampiro...
Recordamos verlos todos en la estantería de la Librería Flash, regentada por el ahora gozosamente jubilado Nico, y nos preguntamos en cuanto habría cambiado nuestras vidas si en vez de tirar por la Fantasía lo hubiésemos hecho por la Ciencia-Ficción, el Terror o el Espionaje de altos vuelos.
Todos engendraron sus respectivas "tribus urbanas", las más pacíficas, reunidas en torno a mesas camilla.
Hablando a continuación de la posterior llegada y éxito de Dungeons & Dragons, el libro contiene curiosos extras como una entrevista a Albert Monteys -que ilustró algunas de las primeras publicaciones roleras del país o a Fernando Herrera (Hobbyconsolas)cuando le tocó el turno a aquellos rudimentarios videojuegos que todos disfrutamos, con paciencia y placer, como si fueran la mas inmersiva realidad virtual de la actualidad. Todo eso, y más.
Desde los antecedentes en literatura de los juegos de rol, a los libro juegos, las películas o programas de TV nacional basados en ellos, hasta los exitazos patrios como Aquelarre -que acabamos de leer, hoy cumple 33 años- o Fanhunter, no me cabe duda de que cualquier rolero de pro, sea "de la vieja guardia" o actual devorará estas páginas con idéntico deleite al que hemos sentido nosotros.
Y aún si nunca han jugado, esta es la ocasión para descubrir la apasionante realidad de este fenómeno, que hace mucho más y más bueno que inspirar los crímenes de algún trastornado.
Felicidades al autor y la editorial por tan inmensa contribución.
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