jueves, 10 de julio de 2014

EVENTOS DC (53): SEVEN SOLDIERS OF VICTORY

Un proyecto creado a medida de su guionista, Grant Morrison, y de su promotor, Didio, Seven Soldiers of Victory, consistió en siete miniseries que presentavan nuevas versiones REBOOTEADAS de algunos de los componentes de los Seven Soldiers originales, más los sustitutos de algunos miembros lógicamente ausentes.


Comenzado a publicar antes de Infinite Crisis, transcurre supuestamente antes de esta, pues los personajes aparecen en la batalla final de su nº 7. No obstante, hablar de cronologías a estas alturas del DCU es mera cuestión bizantina.


Los Seven Soldier fueron el segundo supergrupo de la Golden Age de DC, protagonizando 14 aventuras en Leading Comics, y siendo recuperados en el más mítico cruce de la JLA/JSA, para celebrar el nº 100 de los primeros.


Fiel a la nueva filosofía de la empresa, lo primero que hace Morrison es quitar de enmedio a los pocos supervivientes del grupo original, como Vigilante, para dejar sitio a sus nuevas -y en muchos casos menores e incoherentes- versiones.


En medio de una industria OBSESIONADA con lo autoconclusivo y "reader friendly", a Morrison no solo le dan siete miniseries y dos "bookends", sino que le permiten crear un complejo tramado que interrelaciona -de aquella manera- todas las historias.


Quizás la moraleja es esa: Que no existe más "Universo DC" que el que cada autor contempla dentro de su propia carrera, o más allá, proyecto a proyecto.

Aquí Morrison a la vez rescata sus añorados y queridos conceptos pre-Crisis a la vez que pisotea algunas de las mejores historias post-Crisis, que ni ha leído ni parece valorar en absoluto.


Las miniseries varían en su calidad e intención, pero si en algo destacan es en los artistas: difícil equivocarse con tan impresionante plantel.

Sin duda Ryan Sook y su Zatana destacan.


Morrison da un paseo por algunos personajes místicos de DC que acompañan a la hechicera, a la vez, ya digo, recuperando muchos olvidados y transgrediendo las más elementales normas de continuidad con conceptos que se habían establecido muy recientemente.

Zor, un antiguo enemigo de Spectre, queda aquí convertido en un demiurgo caído de un grupo de Siete, que para Morrison son los guionistas y editores que han aparecido en cómics DC, como él.


En Mister Miracle el testigo pasa al fin al eterno aprendiz Shilo Norman, y en esta miniserie Morrison sienta las bases de su Final Crisis, unos conceptos que serán spoileados y vapuleados por la editorial a renglón seguido. Moraleja: Nunca enseñes las cartas que llevas.


Abundan en Seven Soldiers los personajes místicos, y Morrison recupera a Klarion, el niño Brujo de Kirby, como decimos anulando inmediatamente la cercana versión de Sins of Youth.

La miniserie funciona gracias al apabuyante dibujo de Frazer Irving, que irrumpe con Morrison en el mercado americano.


Shining Knight retrotrae al personaje artúrico a un pasado céltico antediluviano. La amenaza de los Shide y su Reina, principal enemigo, provienen de ese mundo primordial.


Con Frankenstein Morrison homenajea los complementos de la serie de Phantom Stranger. Aquí el monstruo queda convertido a su vez en mata-monstruos, y esta alma atormentada y poética acabará más tarde siendo simplificado como una burda versión de Hellboy en DC.

Melmoth, su enemigo, recalca el gusto de Morrison por la ficción gótica.


Guardian recrea al personaje de Jack Kirby junto a una nueva banda infantil creada por retro-continuidad en el lugar de la clásica Newsboy Legion.

Dibujada por Cameron Steward es quizás la que menos sentido tiene.



Bulleteer, uno de los primeros trabajos del ahora hiperfamoso Paquette, es una interesante exploración de las superheroínas en un tono post-moderno. Un gran personaje que como la inmensa mayoría de las docenas de conceptos aquí generados fueron radicalmente olvidados a renglón seguido.


La moraleja de todo esto es que de nada sirve crear y recuperar conceptos si estos quedan aislados del resto del Universo DC, olvidados por sus autores, o contradiciendo algunos establecidos por autores aún más importantes.

Pero por supuesto, la DC actual es la DC de LAS ESTRELLAS, y este proyecto y sus tomos recopilatorios solo contribuyeron a endiosar más a un Morrison cuyos trabajos, a partir de este, serían muuuuuuuuuuuuuucho más manipulados por la editorial y vilipendiados por la crítica.

"Yendo el caliente, riase la gente..."

1 comentario:

Anónimo dijo...

Lo que no me gusta de morrison es que descarta muchas historias buenas, ,muchas veces por sentido común, no se yo pero se a auto-declarado friki y muchas historias como citas de la post- crisis las descarta de una manera descarada, tiene talento, vamos pero el creerse estrella pop de los comics tiene sus desventajas

Sebastian O