Otra serie con conexión Sherlockiana que quizás los aficionados más veteranos desconozcan es esta, Detective Conan, y si, por que ese "Conan" viene de Conan Doyle, el autor favorito de este investigador adulto que está atrapado en el cuerpo de un niño.
Ya saben, esas cosas raras de los japoneses, como con Ranma 1/2.
En cualquier caso, Conan y sus investigaciones casi son el McGuffin del Manga, ya que el está rodeado por una peculiar familia con la que vive: el padre es detective privado y la madre una brillante abogada.
Ambos se llevan a matar y están medio separados. El es un borrachín ligón que acaba inmiscuido en un asesinato, y su esposa casi duda en si defenderlo y aclarar lo que ocurrió o darle una buena lección y dejarlo diez años en la cárcel.
En definitiva una lectura ligera y divertida donde lo de menos son los misterios detectivescos por que lo que se disfruta son las situaciones que se plantean y los rifirrafes familiares de los personajes.
"el padre es detective privado y la madre una brillante abogada."
ResponderEliminarEso no es del todo exacto: Conan Edogawa vive con la familia de su amiga de la infancia (otro tópico clásico de los mangas). En realidad su padre es un famoso escritor de novelas de misterio y su madre una talentosa actriz.
Y, en cuanto a lo de lectura ligera... El manga lleva publicándose 1994 y todavía sigue publicándose, lo que hace que actualmente sea el vigésimo primer manga con más número de volúmenes publicados (88 en este momento).
P.D. Que el autor escogiera el apellido "Edogawa" también está relacionado con las novelas de detectives. Viene del autor japonés de novelas de detectives Ranpo Edogawa. Bueno, en realidad gran cantidad de los nombres que aparecen en ese manga están relacionados con autores o personajes de novelas de detectives).
Someone
Gracias eso iba a decir 😁
EliminarDetective Conan, tantos recuerdos... Compré todo el vol1 y hasta el tomo 40 y tantos del vol2.
ResponderEliminarEs un buen manga, especialmente a partir del segundo volumen. Tiene casos divertidos, misteriosos, angustiosos... aunque a la larga puede resultar monótono.