QUE NARANJA ERA MI HOBGOBLIN...

Hay veces en las que despertar el interés de los lectores es algo asquerosamente fácil. Para la gente inteligente, eso sí. Así fue con la aparición del Hobgoblin en la nunca suficientemente alabada etapa de Stern/Romita Jr.

Tras comprar los primeros números del Spidey de Forum, rastrear los siguientes en mi pueblo fue una odisea. Precisamente la aparición del Duende se me escapó a pesar de verlo colgado en el kiosco, y solo conseguí el siguiente, con la mitad de la aventura.

Para un lector novato, el misterioso personaje escondido bajo la máscara era PELIGROSO, VIOLENTO, SÁDICO, IMPLACABLE. Esos murciélagos-cuchilla cortaban de verdad. Y dolían. Y a Spidey le daba una tunda de muerte. Y se escapaba tan tranquilo. El mal definitivo. Inteligente, siempre con salidas planeadas. Una pesadilla, vaya.

En realidad lo afilado no eran las cuchillas, sino los lápices de Romita Jr., entonces un joven con ganas de comerse el mundo y que encima estaba trabajando en la serie que consagró a su papá. Y por supuesto Stern supo actualizar lo mejorcito de Spidey, incluido el misterio de quien se esconde bajo la máscara del Duende.

No es por presumir, pero antes de Hobgoblin Lives!, yo siempre sospeché que la clave del asunto, o la identidad del Duende, se escondía en la escena del Club Century, aunque no conociendo toda la historia de Spidey no pude acertar que se trataba de Kingsley (personaje introducido en unos Spectacular que yo no he leído hasta recientemente).

Así que al Duende los veteranos lectores de Spidey lo disfrutamos aún cuando la cosa se convirtió en serial y lo de descubrir su identidad acabó siendo en un chiste.

Tras Hobgoblin Lives, Kingsley se retiró -por no enfrentarse a Osborn-, sólo para regresar en la nueva etapa de Big Time. Cosas grandes le esperaban en esta nueva y excitante etapa. Una nueva situación en la que Spidey ya conoce su identidad pero él tiene el doble de ganas de venganza. Y además el personaje es gay. Una "marica mala" de mucho cuidado. Elegante y retorcido. Como Jeremy Irons.

Mas como sabéis, Slott anunció la llegada de un Hobgoblin cuya identidad no sería un misterio. Pues bien, así ha sido. Ya se sabe quien es el nuevo y no, no es Kingsley. Y el "traspaso de poderes" ha sido algo...traumático.

Dejadme decir primero que tengo una absoluta confianza en el editor Wacker y su modo de hacer cómics de Spidey, Slott es por supuesto un excelente guionista y aún mejor cuando trata a su adorado Spidey y hasta Ramos, que no es santo de mi devoción, esta desde luego haciendo el mejor trabajo de su carrera en esta etapa.

Pero "BIG TIME" ha empezado fuerte y con SORPRESAS, no cabe duda, y con un par de decisiones de Slott que yo desde luego no comparto y que no se si tragarme o no... Polémica habemus. No digo más por no spoilear.

Eso si, mas vale que ahora más vale que el nuevo Hobgoblin (un viejo conocido de todos) esté a la altura del anterior. Dan, I'm watching you...

Lo cierto es que parece que editor y autor quieren respetar el trabajo de Stern y consideran que Kingsley era un personaje suyo.

Y Slott quiere crear su propia versión y dejar su sello en la serie

Atentos chicos, aquí no hay nada sagrado...