Así que ha supuesto una gran alegría reencontrarnos ahora en Madrid.
Eran tiempos de amistad, de cartas, de conexiones, de descubrimientos y de afición compartida que sin duda ahora añoramos.
Eran tiempos de amistad, de cartas, de conexiones, de descubrimientos y de afición compartida que sin duda ahora añoramos.
Aunque las actuales tecnologías permiten una reproducción profesional hasta para el menos ducho en ellas, sobre todo comparada con aquellas pretéritas fotocopias, los fanzines perviven y tienen una importancia crucial a la hora de dar oportunidades a artistas noveles y no tan noveles, un bonito hobby a mantener y una comunidad que trabaja con pico y pala los más básicos cimientos del cómic.
En este que nos ocupa, ocho artistas de diferentes estilos abordan el reto de realizar historietas con 7 viñetas como máximo, un desafío narrativo nada desdeñable.
Les animo a que si tienen ocasión, se hagan con el y apoyen entrañables y fundamentales iniciativas como esta.
Los artistas siempre necesitan que les muestren que su obra merece la pena, y cuando están empezando, aún más.
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