MAKGIA SIN LÁGRIMAS, POR ALEISTER CROWLEY

Para los que hemos conocido durante décadas la figura de Crowley poder leer al fin sus obras en una edición digna es una experiencia cercana al Shamadí.

La nueva editorial Aurora Dorada nos ofrece esa oportunidad en su segunda publicación, un MACROVOLUMEN de 500 páginas que recoge toda una serie de lecciones del Crowley ya maduro a una de sus discípulas, con la ventaja de que así podemos tener una idea real de su pensamiento final, tras toda una vida de estudio del Hermetismo.

Escrita como una guía para iniciados que comienzan su camino en la Gran Obra, Frater Perdurabo va tratando todos los tópicos de la odisea espiritual tal y como estaban de moda en el tiempo en el que estos escritos fueron producidos, suponiendo un ejemplar modelo de cómo se transmitía este conocimiento cuando aún quedaba en el un poco de aspecto ESOTÉRICO.

El pensamiento de Crowley, que sistematizó en su doctrina de THELEMA procede de tres fuentes principales: La Cábala Hebrea -que aprendió en las sociedades secretas a las que perteneció, como la que da nombre a esta editorial-, La Mitología Egipcia -tan en boga entonces- y la recepción en Europa del Pensamiento Oriental -en particular el Taoismo y el Hinduismo- que popularizaran los Teosofistas y demás movimientos espirituales de finales del XIX.

Pero además de su lectura sincrética de todos esos sistemas, Crowley además nos da su visión sobre los aspectos más "folklóricos" del Hermetismo, como la Magia Ritual, el Viaje Astral, los Poderes Espirituales de todo signo, los Ángeles, los Sueños, etc, etc, etc...

Y lo hace de una manera mucho más RACIONAL de lo que cabría esperar de un señor que se disfrazaba de egipcio. La influencia de la nueva Ciencia se deja sentir en su obra, y Crowley quizás se destaca -dentro de las coordenadas de su época- por deslindar las supercherías de la verdadera búsqueda espiritual, quizás menos colorista pero mucho más profunda.

"Iniciación es adentrarse en uno mismo y hacer la paz con todas las fuerzas que se encuentran allí" es solo una de las muchas joyitas que podemos rescatar de sus enseñanzas.

Y mientras aconseja que la iniciada se acostumbre a interpretar la Realidad en términos cabalísticos, reduciendo todo a su equivalente numérico, luego le aconseja algo como:

"Es SU CÁBALA la que tiene que funcionar para usted, NO LA MÍA", expresando que, por mucho que se estudie un sistema, la comprensión del mismo es siempre personal. Y por lo tanto no hay que seguir a la letra muerta a ningún maestro, sino emular a Crowley y estudiarlos todos para formar el propio de cada cual.

Como en todos sus escritos, de mucha más calidad literaria que la mayoría de escuelas análogas, podemos encontrar una mezcla de grandes intuiciones con fragmentos que se nos antojan salidos del no pequeño ego del autor, como cuando se declara el enviado actual de los MAESTROS ASCENDIDOS, "sello de los Profetas" y, en general, todas esas tonterías que dicen todos los escritores herméticos sobre si mismos sin percatarse que el suyo es solo un punto de vista más, jamás absoluto ni definitivo.

Pero toda esa colorista "mitología espiritual" es también apasionante de leer, y este libro destaca por la ironía y el humor con que Crowley lo escribe, algo que denota su inteligencia, aún a falta de un poco de humildad.

Nos quedamos pues con el valor SINCRÉTICO de su visión, y continuaremos los estudios sobre sus obras y, sobre todo, las fuentes de las mismas, siempre que esta magnífica y oportuna editorial nos lo permita.

Por cierto que su director estará presentándola el Lunes 24, en pleno solsticio -sincrónicamente con nuestro cumpleaños, ¡para profeta yo!- en la madrileña LIBRERÍA LA LUMBRE a las 19. 30.

¡¡No podemos insistiros bastante sobre el valor de asistir a semejante CONCILIÁBULO que sin duda dejará las performances mísiticas de Alan Moore como si fueran una obra de fin de curso de parvulitos!!

¡EL EÓN DE HORUS VA A LLEGAAAAAAAAR...!