viernes, 8 de febrero de 2019

WHITE BOY RICK: CUANDO EL SISTEMA NO SALVA PERO SI CONDENA

ESTE ES EL PELICULÓN DE LA SEMANA.

Basado en hechos reales, cuenta la historia de un adolescente de clase baja ni más ni menos que en la Detroit de 1.985.



Matthew McConaughey repite magistralmente en el único papel que parecen ofrecerle últimamente: el del padre "White Trash", cuyos trapicheos vendiendo armas ilegales a los malotes del barrio echa a rodar la pelota de nieve que desembocará en el dramático final.

El niño, relacionándose con los chavales negros del barrio, camellos y traficantes de un mundo que se movía gracias a la droga, se integra en sus bandas con 15 años. De ahí el mote: Rick El Blanquito.


La policía y la fiscal pronto lo reclutan y lo chantajean para que delate a sus compañeros y les ayude a empapelar varias casa de crack, o meterán a su padre en la cárcel por ir vendiendo armas ilegales. Y los acontecimientos se suceden hasta que acaba convertido en el nuevo capo del barrio.

La familia, que además tiene una hija yonki y unos padres ancianos -la esposa los abandonó-, sueña con poner un videoclub -por entonces, el negocio de moda-, un negocio legal con el que poder escapar por fin a ese submundo al que su clase y extracción social los ha CONDENADO.


Ya saben lo suficiente de esta película como para ir a verla: Demuestra magistralmente como los criminales no siempre son "malos", no nacen malos, y en un gran porcentaje no tienen, ni saben, ni conocen, ni pueden alcanzar JAMÁS otros medios de vida que no sean los ilegales.

Y si alguna vez tienen la ocasión, ya es demasiado tarde para escapar al único modo de vida de conocen y comprenden.

¿CÓMO SE PUEDE CONDENAR A ALGUIEN POR VIVIR LA ÚNICA VIDA QUE LES ES DADA...?


Y luego está la policía y los jueces, capaces de hacer cualquier cosa por meter en la cárcel a unos traficantes que a los cinco minutos ya han sido sustituidos por otros mejores y más grandes y crueles.

Pero cuando se trata de salvar la vida aun de quienes han colaborado con ellos, la "justicia" es un poquito más lenta, y se lleva por delante individuos, familias y... sueños.

Un sistema que es incapaz de SALVAR...¿que autoridad tiene para CONDENAR...?

ESTE ES EL MUNDO EN QUE VIVIMOS, a mi no me hace falta irme a la Detroit del 85. Solo abrir la ventana.

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