Una película más dentro de la fiebre ochentera de "niños con bicicletas enfrentados a misterios" pero que consigue convertirse en un producto original, que va más allá de la manida premisa.
Uno de los chavales es muy aficionado a las conspiraciones y los temas paranormales, pero de repente se va a chocar con un un terror mucho más real y cercano.
Uno de sus vecinos es policía y una noche ve a un adolescente junto a el en la casa de este.
Unas semanas más tarde, la foto del chico al que vio aparece en un cartón de leche, indicando que es un niño desaparecido.
Sospechando que su vecino es un asesino en serie que ataca a jovencitos, el y sus amigos organizarán un operativo para investigar los sospechosos movimientos del oficial de policía.
¿Forma todo parte de la calenturienta imaginación de los chicos o hay base en sus observaciones...?
Entretenida y bien articulada, en realidad pretende erigirse en la primera de toda una nueva saga de terror.
¡De la taquilla depende que veamos las secuelas!
Totalmente de acuerdo contigo Pedro!!
ResponderEliminarEsto es de lo mejor que ha resultado del "efecto Stranger Things".