Como comentamos, a partir del especial Countdown to Infinite Crisis, las líneas argumentales se separan en cuatro aspectos, historias que no solo se resolverán en Infinite Crisis sino que decidirán su propia estructura.
Personaje fetiche de Didio, OMAC, la serie futurista de Kirby, será versionada en el presente, como un satélite inteligente -Brother Eye- creado por el paranóico Batman para vigilar al resto de superhéroes que cobrará vida propia.
Series de espionaje como Checkmate serán los protagonistas de esta aventura, intentando detener al satélite que, como el ordenador de 2001, se ha vuelto contra sus creadores.
El enfrentamiento entre Rann y Thanagar establecido en los números de Swamp Thing por Alan Moore se concretará al final en una guerra abierta entre ambos planetas. Hawkman y Adam Strange, como representantes de ambos mundos, intentarán detener la locura bélica.
La serie además servirá para que toda suerte de personajes estelares acaben allí involucrados, como si el Universo no fuese suficientemente grande y los personajes necesariamente ALIENÍGENAS como para no conocerse, ni coincidir, ni tener objetivo en común.
El mundo mágico vivirá una nueva revolución, cuando un Spectre desatado de nuevo acabe hasta con la legendaria Roca de la Eternidad, la sede del mago Shazam.
En medio de esta nueva era de la magia, una serie de personajes secundarios como Blue Devil, Shadowmaster, Echantress, Detective Chimp y Ragman se agruparán en un nuevo grupo místico, de los que tantos han existido -y fallado- en la historia de DC.
Por último, imitando claramente el Wanted de Millar y Jones, que hará las portadas, los mayores villanos DC vuelven a reunirse en una Secret Society.
El grupo estará dirigido por una cúpula, la Sociedad, y luego compuesto por toda suerte de contradictorios villanos cuya alianza es realmente imposible.
En realidad, la serie servirá para que un grupo de ellos formen los Secret Six, un antiguo título DC que ahora agrupa a unos villanos que pronto acabarán siendo anti-héroes.
Adherida a este grupo está la miniserie de Power Girl, en la que Johns desarrolla in extremis las ideas sobre su origen que ya había sugerido en JSA. Habiendo dado por nulo el origen post-Crisis como nieta de Arion, la miniserie increíblemente acaba sin descubrir la procedencia del personaje, una idea que se reserva ya para Infinite Crisis.
Estas 4 miniseries, cuyos argumentos ya decimos que forman la espina dorsal de Infinite Crisis, son en realidad los primeros episodios de varias series regulares o series de miniseries que continuarán durante años tratando estos diferentes aspectos del Universo DC.
Así, un nuevo OMAC pronto gozará de una serie propia (rápidamente cancelada).
Diferentes miniseries explorarán las aventuras espaciales de los héroes alienígenas, aunque sin la presencia de los dibujos de Ivan Reis ninguna alcanzará la relevancia de la primera, a pesar de estar guionizadas por el maestro Jim Starlin.
Los héroes de Shadowpact, a los que se irán añadiendo nuevos y viejos personajes, mantendrán su serie propia durante tres años, constituyendo en realidad un prototipo de lo que tras el reboot será Justice League Dark, que por su nombre vende un poquito más.
Los Secret Six tendrán una trayectoria similar, siendo la serie en la que Gail Simone destaca como guionista.
Una división bastante práctica y lógica de las líneas argumentales principales del Universo DC pero que luego, como en el resto de los cómics, se concretarán en tebeos apresurados y donde nunca se llega a concretar nada.
Había comenzado ya lo que ahora se conoce como "micro-managment" de las historias, una revisión enfermiza de argumentos y continuos cambios que solo logran quitar toda lógica a los desarrollos.
Rann thanagar war tanbien serbira para "simplificar" la historia de hawkman grasias al exterminio de las bersiones post crisis
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