Como siempre estamos pre-ocupados con con que tal y como de fiel será la siguiente película basada en los cómics, quizás somos los aficionados a estos los últimos en darnos cuenta de que nuestra -antes y, me temo, ahora- marginal afición, los personajes que seguimos mes a mes y con los que crecimos se han convertido en algo más, en MUCHO más.
Poquito a poco, con el paso de los años, con bastantes aciertos y algunos sonoros fracasos, los superhéroes han tomado Hollywood como su nuevo reino.
Cuando millones de personas alrededor del mundo vibraron con Avengers se consumó la para nosotros traumática realidad: Los personajes ya no nos pertenecen a los lectores de cómic, sino que, como decía Reeve al final de Superman IV: "Pertenecen al Mundo".
No se trata de que las películas sean todas taquillazos, ni siquiera de que -más crucial- estén muy bien hechas: Es que, uno por uno, los mejores actores y directores de Hollywood ya no son nadie si entre película y película no se calzan las mallas de colorines, el cuero o cualesquiera uniforme les hayan diseñado los encargados de vestuario para disimular el spandex de cuatricomía.
Ser un superhéroe, o ahora incluso un villano, es algo que los mejores actores y sus agentes deben estar disputándose con luchas intestinas.
Lejos de encasillarte en el papel y acabar con tu carrera, encarnar a un personaje de tebeo ahora te aúpa a las mayores cotas de popularidad. Te da un trabajo regular, por que las secuelas están aseguradas, y te consigue el mayor número de adolescentes histéricas/os a este lado de Justin Bieber.
Nada de fichar desconocidos que no tienen nada que perder: Ahora, aunque tu carrera esté en su zenith, para estar en candelero tienes que echar rayos por los ojos y pasarte 6 horas maquillándote todos los días.
En tiempos de Lawrence Olivier a los actores del cine se los valoraba por el número de personajes Shakespirianos que habían interpretado con éxito.
Ahora, no solo los jóvenes sex symbols, sino hasta los más premiados actores "ex-shakespirianos" se miden por los superhéroes (o personajes de sagas fantásticas análogas) que llevan intrepretados en su haber: "Get over it!"
Para los fans de los cómics, esto tiene sus pros y sus contras: Siendo bastantes menos comerciales, las publicaciones se han convertido en buena parte en mero campo de pruebas de historias que se puedan luego adaptar a la pantalla.
La semana pasada, Brian Hitch, artista adalid del realismo "cinematográfico" urgía a guionistas y artistas a ir más lejos que las películas, elevar de nuevo el listón, inventar y dibujar de nuevo cosas que estas tarden años en poder hacer.
Cuando no son campo de pruebas, los personajes y argumentos de los cómics quedan esclavos (como la Filosofía medieval de la Teología) de las versiones cinematográficas, y son más de uno y de dos los personajes actualmente DESTRUIDOS solo por buscar imitar la en ocasiones pálida o deformada versión que podemos ver en las pantallas.
Pero el objeto de este artículo es, reconociendo esos inconvenientes, celebrar el que nuestra "fe", aún redefinida, esté resultando absolutamente universal.
Se trata de un nuevo triunfo de la épica, que no encandilaba tanto al público en general desde que le "secase el seso" a mi paisano Don Quijote.
Guionistas y dibujantes, directores y productores, son los nuevos "Homeros" de esta nueva mitología.
No solo ya en los personajes de Marvel y DC: Star Trek, El Hobbit, Sherlock Holmes, Harry Potter, Crepúsculo... ¡Si el protagonista de una película no vuela, debe ser un documental sueco hecho con tomavistas! O una de la Guerra Civil española... ;-)
Fantasía y ciencia-ficción han pasado de ser objeto de culto para individuos con falta de habilidades sociales a convertirse en modernas revelaciones. Lo que algunos ya sospechábamos...
Y si, quizás el cine ha restado libertad creativa a los cómics, o menguado en algo a los personajes al adaptarlos en ocasiones parcialmente.
Pero al darles la fama, también los ha consagrado como Historias UNIVERSALES, dramas humanos que vemos alabar en masa, desde los preestrenos de Japón a los de Los Ángeles.
Y aún más importante: Mientras haya superhéroes en el cine -y muy mal tiene que ir la cosa para que esa tendencia se tuerza- Disney y Warner mantendrán sus divisiones editoriales y nosotros podremos seguir disfrutando semana a semana de sus novedades.
Atrás han quedado los tiempos en que Marvel era una empresa en quiebra. Y no se lo debemos a Bill Jemas, se lo debemos a Avi Arad, casi un nuevo "San Pablo" capaz de predicar nuestra minoritaria religión a "los gentiles".
Recemos nosotros pues a San Christopher Reeve por el éxito de las numerosísimas películas que nos esperan, y por que estas sepan tratar con respeto e integridad a los personajes de nuestra niñez.
Y disfrutemos de paso de los grandes cómics que se están realizando actualmente al amparo de estas películas: No habría seis series de Avengers, tan buenas de media, si no nos estuviese esperando una nueva cinta del grupo.
Hombre, en los 80 el cine de fantasía ya se volvió blockbuster siempre que estuviera hecho con un mínimo de dinero y tuviera su buena campaña de marketing. Esto no deja de ser una secuela de todo aquello, con padres que reviven su infancia y hijos que han mamado aunque sea de refilón las aficiones de sus padres.
ResponderEliminarSolo que ahora sin los complejos de ser un friki raro gracias a que los productores saben que este mercado de adolescencia hiperexpandida da dinero y los medios se empeñan en recordarnos lo normales que somos.
Y mientras Alan Moore. considerado el mejor guionista de cómic, estirandose la barba y pensando en aquello que decía sobre que el escapismo también tenia que hacernos reflexionar y usos mejores para los presupuestos que se gastan en peliculas... XD
>adolescencia hiperexpandida
ResponderEliminar¡Me encanta el término!
A lo mejor es que esta adolescencia hiperexpandida es el estado natural del hombre.
Después, ya, te mueres.
Lo irónico es que hoy en día es hasta 'cool' que te gusten los superhéroes cuando en mis tiempos los compis de la clase te metían de hostias por no saberte la alineación completa del Real Madrid, o leer libros sin que (¡gasp!) te lo mandase la profesora. Supongo que es una cuestión de 'timing', ahora en el colegio sería el rey del mambo...
ResponderEliminarTambien te digo que este rollo de las película es para gente que busca "emociones Lucasspielbergianas". Si sacan tres pelis de superheroes que pinchan y deciden adaptar el videojuego Assasins Creed con éxito, verías como tiraban a la papelera a los superheroes y se centraban en comprar franquicias de videojuegos para adapatar...
ResponderEliminarD.F. Marin, lo que yo no entiendo es que no adapten videojuegos como Assasin Creed, God of War o Uncharted, independientemente de que los superheroes triunfen o no.
ResponderEliminarVamos, que para sacar blockbuster chuscos tipo "Transformers" o "Furia de Titanes" bien podrían apostar por este tipo de adaptaciones.
Hubo un tiempo en que el western también era un género muy popular. Ddurante su época dorada todos los años se estrenaban docenas de película de vaqueros, y no había estrella de Hollywood digna de tal nombre que no se pusiera en alguna ocasión las botas y las espuelas. ¿Alguien recuerda cuál fue el último western taquillero que se estrenó? Exacto. Completamente de acuerdo con D.F. y su teoría de los tres fracasos consecutivos: un par de fiascos como Green Lantern o Jonah Hex, y verías tú dónde acababan las adaptaciones... Pasa también con actores y directores, lo llaman la "ley de los tres strikes": como tengas tres fracasos seguidos te enseñan la puerta, y despídete de volver a trabajar. Hollywood es lo que tiene, que es tan voluble como una veleta.
ResponderEliminar> ¿Alguien recuerda cuál fue el último western taquillero que se estrenó?
ResponderEliminarDjango? ;-))
Ya se cuidarán mucho las productoras de no cagarla.
¿Por que lo van a hacer? Marvel Studios solo va a mejor, y la Fox pega duro.
>D.F. Marin, lo que yo no entiendo es que no adapten videojuegos como Assasin Creed, God of War o Uncharted, independientemente de que los superheroes triunfen o no.
ResponderEliminarLa razón tiene nombre y apellidos: UWE BOLL XXD
Aun asi estan tanteando ahora con Warcraft dirigido por Sam Raimi. A ver que sale...
Jejeje, que gran reflexxion. Los que anda por ahi quejandose aun de Iron-man 3 ojala la leyeran XD.
ResponderEliminarBueno, ps yo nomas digo como friki, que bueno que me toco vivir esta epoca.
Saludos.
Amén, hermano.
ResponderEliminarlos Guardianes de la Galaxia, pincharan, caeran y Spiderman No habra tejido una red para evitar que marvel se de el ostión padre.
ResponderEliminarTambien hay que tener en cuenta que le cine desde hace 30 años ha perdido como el 70 % del público que tenia.
ResponderEliminaro Sea quizás no sea que los superheroes se han hecho tan grandes como para llegar a Hollywood sino que Hollywood se ha hecho tan pequeño como para recurrir a los superheroes.