lunes, 25 de mayo de 2015

ADAM CLARKS

Narrar historias de un modo visual va muchos más allá de saber dibujar un tipo o tipa con todos los músculos en su sitio o saber copiar el fondo adecuado de una fotografía.

El arte de la narrativa visual implica muchos más aspectos.


Adam Clarks presenta a un ladrón de guante blanco que se ve metido en una trama de espías durante una Guerra Fría donde los coches vuelan.

Se une así al revivir de este tipo de aventureros, como Fantomas.

Pero en este caso, el concepto es lo de menos.


Lapone propone una divertida trama que podríamos imaginar progatonizando al Cary Grant de "Atrapa a un ladrón", con su Grace Kelly a juego, en este caso una espía rusa.


Pero sin duda es Hautière quien da vida al proyecto, recreando un mundo fantacientífico con una estética de los años '50, principalmente del diseño y arte comercial.

La trama podría encajar en cualquier lado, pero es ese tipo de dibujo el que nos remite a esa precisa década.


Me recuerda poderosamente al trabajo de Darwyn Cooke a la hora de recrear los '50 en New Frontier.

Un excelente y necesario recordatorio de que no todo en el cómic ha de ser fotorealismo para triunfar y transmitir.

1 comentario:

jose manuel dijo...

A mi me ha encantado.